Conflicto colombiano ha afectado a 250.000 niños desde 2013, según Unicef
A todo ello se suma un mínimo de 180 menores víctimas de violencia sexual y más de 230.000 que se vieron desplazados de sus hogares.
El conflicto en Colombia ha afectado a más de 250.000 niños desde que en 2013 arrancaron las conversaciones de paz, según un informe publicado hoy por Unicef.
De ellos, unos 1.000 fueron utilizados o reclutados por grupos armados durante ese periodo, señala la agencia de Naciones Unidas para la infancia.
El informe apunta que al menos 75 menores fueron asesinados y 180 resultaron heridos en estos últimos tres años, con 130 muertos o heridos por minas o explosivos que no habían detonado.
Hasta 65 escuelas se vieron dañadas por combates o fueron utilizadas con fines militares, denuncia Unicef, que asegura que al menos 10 maestros fueron asesinados desde 2013.
A todo ello se suma un mínimo de 180 menores víctimas de violencia sexual y más de 230.000 que se vieron desplazados de sus hogares.
La inseguridad, el miedo a ser reclutados, las amenazas de abusos y el problema de las minas están llevando a muchos niños a dejar la escuela, añade el informe.
La situación, como es natural, es especialmente mala en las zonas de conflicto, pues los menores que viven allí representan el 40 % del total que no acude a las clases.
Pese a todo, desde que empezaron las negociaciones de paz entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) la situación de los niños ha mejorado claramente.
Por ejemplo, entre 2013 y 2015 se redujo a la mitad el número de menores muertos o heridos por minas y restos de explosivos, mientras que la cantidad de desplazados bajó un 40 por ciento.
Sin embargo, Unicef subraya las grandes dificultades a las que se siguen enfrentando los más pequeños en el país y cómo pueden continuar más allá del fin del conflicto.
"Incluso si la paz se firmase mañana, los niños seguirán estando en riesgo de todo tipo de violaciones incluyendo el reclutamiento, las minas antipersona y la explotación sexual", señaló en un comunicado el representante de la agencia en Colombia, Roberto De Bernardi.
"A menos que estos niños reciban la asistencia material y psicológica que necesitan, las perspectivas para una paz duradera seguirán siendo difíciles de alcanzar", añadió.
Entre otras cosas, Unicef defiende la importancia de proteger a los niños asociados con grupos armados y de reunirlos con sus familias con apoyo para su reintegración.
En ese sentido, recuerda que liberar a todo menor de 18 años no debe depender del resultado del acuerdo de paz y que será necesario ofrecer oportunidades para los niños afectados por el conflicto, pues si no volverán a unirse a grupos armados.
"Ningún niño conoce hoy en Colombia lo que es vivir en un país en paz. Es momento de pasar página", insistió De Bernardi, quien pidió que la protección de los menores sea "una prioridad".
EFE