Autoridades investigan la misteriosa muerte de Felipe Correa, un empresario de 32 años hallado muerto horas después de desaparecer en Bogotá, en un caso digno de una novela de Agatha Christie.

La desaparición de Correa fue tendencia en las redes sociales debido a las peticiones de búsqueda de familiares, amigos y personajes como el hijo del expresidente Ernesto Samper, Miguel Samper; la excandidata presidencial por el Partido Conservador, Marta Lucía Ramírez y el periodista Daniel Samper Ospina.

El empresario, según su esposa María Jimena Díaz, quedó de recogerla en su lugar de trabajo, en el norte de Bogotá, pero jamás llegó.

Inicialmente se creyó que Correa, que desapareció el martes pasado, había sido secuestrado, pero al hacer seguimiento en sus cuentas bancarias se descubrió que retiró dinero de un cajero automático e hizo compras en una almacén de cadena.

También se contempló la posibilidad de que hubiera sido víctima del "paseo millonario".

Sin embargo, el miércoles por la mañana, Correa fue reconocido por dos personas que vieron el mensaje de su desaparición en redes sociales, a quienes el empresario les dijo que estaba "bien" y todo era "un malentendido".

Estas personas intentaron comunicarse con los números de contacto difundidos en las redes sociales, pero no hubo respuesta.

El cuerpo de Correa fue encontrado ayer en la parte baja de un hotel cercano al estadio de fútbol Nemesio Camacho "El Campín", en donde se había hospedado horas antes.

Se especula que el empresario se suicidó al lanzarse del séptimo piso del hotel.

Por su lado, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses trata de establecer si a Correa le dieron en algún momento escopolamina.

Asimismo, las autoridades asumieron la investigación para tratar de esclarecer la muerte del empresario.

EFE