La Liga de Gobernantes Anticorrupción, el partido del excandidato presidencial Rodolfo Hernández, se salvó de perder la personería jurídica, pero no estuvo exento de un serio llamado de atención por parte del Consejo Nacional Electoral, CNE.

Los magistrados dejaron en firme el reconocimiento político a la colectividad, sin embargo le dieron un ‘jalón de oreja’ para que cumpla con las reglas del juego democrático.

Una de las cosas que incomodaron al CNE, fue suprimir el cargo de presidente de partido, y transformarlo en un miembro honorario, que en este caso sería Rodolfo Hernández.

Para los magistrados, esa jugada fue considerada antidemocrática, sin embargo decidieron pasarla por alto y en cambio hacerle sus respectivas recomendaciones y no desaparecer la colectividad.

Los magistrados rechazaron igualmente que familiares del también exalcalde de Bucaramanga, hagan parte de la junta directiva del partido.

Tal es el caso de Socorro Oliveros, la esposa y exdirectora del partido, y Luis Carlos Hernández, hijo, de Rodolfo Hernández.

Según el CNE, es importante que la Liga de Gobernantes Anticorrupción cumpla estrictamente con los compromisos adquiridos y las reglas porque de no ser así, más observaciones podrían someter al partido a sanciones.

La situación con la colectividad se presenta en momentos en que su líder natural permanece bajo rigurosa atención facultativa tras el hallazgo por parte de los médicos de un tumor en el colón que debe ser extraído y tratado.