El pasado 26 de junio se conoció que la Procuraduría General de la Nación formuló pliego de cargos en contra del exalcalde de Santa Marta, Carlos Eduardo Caicedo Omar, por presuntas irregularidades en un contrato de obra celebrado el 2 de abril de 2014 para la construcción de cuatro pozos de agua potable en la ciudad de Santa Marta.

El pliego de cargos señalaba que el contrato no habría garantizado la idoneidad del contratista, ni la selección de la oferta más favorable.

Pero esta no es la única sanción que enreda al exalcalde Carlos Caicedo por este tema. Pues, según conoció en exclusiva Zona Cero, la Contraloría emitió el pasado 3 de mayo un informe final en el que se establece un detrimento patrimonial de $375 millones 614 mil 135 pesos.

Una de las justificaciones de la Gerencia Departamental del Magdalena de la Contraloría para definir este detrimento patrimonial se basó en que de los 4 pozos profundos de agua contratados por la Alcaldía con la empresa Ingeniería del Caribe LTDA, solamente funcionaron dos, lo que equivaldría a un gasto de 737 millones 527 mil pesos. Sin embargo –según el ente de control– la Alcaldía desembolsó un total de $1.095 millones.

Además de estas posibles irregularidades, la Contraloría estableció que, luego de revisar la documentación del proceso de contratación, “en varios ítems no son consistentes los precios unitarios presupuestados versus los contratados, ya que se disminuyen en gran porcentaje las especificaciones técnicas, pero se mantienen similares los precios unitarios”.

Según la Gerencia departamental de la Contraloría, la interventoría no tuvo en cuenta las irregularidades técnicas que descubrió el ente de control, por lo que se evidenciaría un detrimento patrimonial de 18 millones de pesos más, para un total de $375 millones que no se podrían justificar en la ejecución del contrato.

Presencia de coliformes fecales en un pozo

En el informe final de la Contraloría, también se afirma que la Alcaldía de Santa Marta tenía conocimiento sobre los resultados de unas pruebas realizadas sobre los pozos, los cuales arrojaron presencia de coliformes fecales y E-Coli, y que estos no tomaron medidas al respecto.  

“Se evidenció que presuntamente no se tomaron medidas algunas por parte de la interventoría ni de la administración Distrital respecto a los resultados arrojados por las pruebas físico químicas y bacteriológicas del agua realizados al pozo N. 29 San Pedro Alejandrino, ni al N. 5 de la Troncal, el 12 de agosto de 2014, los cuales arrojaron presencia de coliformes fecales y E-Coli, los cuales no aptas para el consumo humano”, dice el documento.

La Contraloría también sostiene que “este valor (de detrimento patrimonial) puede ser incrementado”.

La dependencia remitió este informe final a la Coordinación de Investigaciones y Juicios Fiscales para que abra el respectivo proceso por Responsabilidad Fiscal.