La Procuraduría General falló en segunda instancia en el caso de acoso sexual a una menor de edad de la IED Santa María, de Barranquilla, y destituyó e inhabilitó a exdocente Duber Danovis González Herrera por 12 años.

El ente de control evidenció que, a cambio de colaborarle con la explicación de una tarea asignada a un familiar, el disciplinado asedió a la estudiante solicitándole favores sexuales y citándola a la institución educativa para acosarla en una jornada distinta a la que asistía y, en horario de receso de clases para garantizar la ausencia de miembros de la comunidad educativa.

Adicionalmente, el fallo señaló que se comprobó que el exfuncionario abordó a empleados del aseo “para verificar si el salón de clases (…) se encontraba despejado”.

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La Procuraduría calificó la falta de González Herrera como gravísima a título de dolo, tras demostrar que actuó “con verdadero conocimiento de lo que hacía y pretendía, violando con su comportamiento claras y concretas disposiciones legales y disciplinarias”.

Y aseveró que es deber de los docentes “aportar a la comunidad educativa el apoyo adecuado y oportuno para garantizar que el proceso educativo se convierta en una formación permanente, ligada al crecimiento personal, social o cultural, teniendo siempre de presente la dignidad humana, y más tratándose de aquellos que han sido puestos a su cuidado y atención como son los alumnos”. 

Por último, el Ministerio Público señaló que el sancionado vulneró el principio de moralidad “sobre la base que un docente debe ser ejemplo de rectitud, honorabilidad, respeto y confianza”.