El director del Instituto de Bienestar Familiar en Atlántico, Benjamín Collante, reveló en Atlántico en Noticias que el organismo conoció de dos menores de edad que estaban en las tomas de las sedes de la Universidad del Atlántico, pero no pudieron acceder a ninguna.

Expresó que mandaron un equipo de funcionarios con sicólogos y la misión fracasó, por culpa de los tomistas.

Su declaración se da después de que, Roberto Ortega, padre de la menor Madelayne Sofía Ortega Villa, fallecida en extrañas circunstancias dentro de la sede centro, afirmara que acudió al ICBF para que le ayudaran con el caso de su hija.

"Nosotros tuvimos dos eventos. El primero en que efectivamente una joven se encontraba en la sede norte, de Puerto Colombia, y nos dirigimos allá en compañía del padre, pero fue imposible acceder a la sede, no nos dejaron (los tomistas)", expresó Collante.

"Nosotros les explicamos (a los tomistas) que, como autoridad, debíamos tener contacto con la niña, pero no nos dejaron ingresar y hacer absolutamente nada", agregó.

Reveló que esa niña era compañerita de Madelayne. "Cuando entregaron la sede Centro a esa niña la llevamos a hacer acompañamiento psicosocial", agregó.

Indicó que en la sede Centro las circunstancias fueron iguales. Afirmó que entienden las tomas, "pero es prácticamente imposible que una autoridad acceda".

"No pudimos tener ningún contacto hasta que entregaron la sede, con la compañerita, muy amiga de Madelayne", señaló.

Por último, Collante reveló que le están "haciendo acompañamiento" a la familia de Madelayne Sofía Ortega Villa.