El exvicepresidente Germán Vargas Lleras lanzó este lunes duras críticas al fútbol profesional colombiano, una especie de continuación de lo que fue su columna del pasado fin de semana en el diario El Tiempo, que tuvo como título La mala hora del fútbol.

Vargas en su cuenta de Twitter sostuvo que "la precaria situación financiera se refleja en la mala calidad del espectáculo. Hay que reconocer que en Colombia no estamos viendo buen fútbol en razón de que las pocas figuras que destacan son vendidas al exterior para que los equipos puedan subsistir".

Este tema, que hoy todo el país conoce, ya había sido debatido por expertos, periodistas y comentaristas, pero viniendo de Vargas pareciera que fuera un "jalón de orejas" al presidente de la Dimayor, Jorge Enrique Vélez, uno de los hombres cercanos en su momento al líder de Cambio Radical.

"En cuanto a la televisión por cable, en Colombia solo se pagan 1.000 pesos por cada suscriptor, mientras que en otros países se paga más de 7.000. Y en cuanto a los patrocinadores, aquí hay muy poco apoyo de la empresa privada, a lo cual se suma el incumplimiento de la norma, que yo mismo promoví, para que el 20% de la publicidad oficial tuviera como destino el deporte", menciona Vargas en uno de sus trinos. 

Y añade: "Al decaer el espectáculo caen también los ingresos por taquilla, en un círculo vicioso difícil de romper. No en vano, ningún club alcanzó a llegar a semifinales ni en Copa Libertadores ni en la Suramericana".

Para Vargas, "es urgente ofrecer una respuesta a las razonables peticiones de los 1.100 jugadores de fútbol profesional sobre calendario, descansos, contrato único de trabajo, no discriminación y equidad para el fútbol femenino, entre otras solicitudes". 

Y lanzó la propuesta que "como nadie invierte en los escenarios, debería permitirse a los clubes, mediante acuerdos, tener acceso a la explotación y administración de estos".