El defensor del Pueblo de Colombia, Alfonso Negret, confirmó hoy que 13 personas murieron en un enfrentamiento armado entre presuntos disidentes de las FARC y guerrilleros del ELN ocurrido el pasado 27 de noviembre en el departamento de Nariño, en el suroeste del país.

"Nosotros enviamos desde la semana pasada una misión humanitaria y contrastamos los hechos, las diferentes versiones, y podemos decirle al país que existen 13 asesinatos en otro hecho de violencia ocurrido entre un grupo denominado 'la zona de resistencia campesina' con integrantes del ELN", dijo Negret a Caracol Radio.

Días después de que se conociera el enfrentamiento, se informó de cuatro muertos y que la cifra podría ser mayor, pero las dificultades para llegar a la zona retrasaron el acceso de las autoridades.

Los sucesos se presentaron en el remoto caserío de Pueblo Nuevo, en el municipio de Magüí Payán, y suponen, según el defensor, la segunda violación del cese el fuego bilateral entre el Gobierno y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que empezó a regir el 1 de octubre y se extenderá hasta el 9 de enero.

Ese cese fue acordado en los diálogos de paz que el Gobierno y el ELN llevan a cabo desde febrero pasado en Quito.

"Lógicamente es una nueva violación al cese y lo estaremos denunciando (...) Lo vamos a hacer como la hemos venido haciendo por los canales institucionales", añadió el funcionario.

Negret aseguró que el enfrentamiento en Magüí Payán ocurrió luego de que el ELN intentara quitarle las armas al grupo de resistencia campesina, que no permitió que los guerrilleros las tomaran.

"(La resistencia campesina) empezó a disparar y hubo disparos sin ningún sentido, cruzados, y por eso ocurrieron estos lamentables hechos, fue porque el ELN trató de tomarse las armas del denominado grupo resistencia campesina y estos no accedieron", explicó.

Asimismo, Negret dijo que fue secuestrado William Janey Ortiz, un disidente de las FARC conocido con el alias de "El Gavilán", y denunció que las poblaciones de la costa del Pacífico colombiano están "confinadas" por las "guerras".

"Además está ocurriendo un hecho que lo hemos denunciado en todo el andén Pacífico que tiene que ver con el confinamiento, la gente de las comunidades de estas veredas sigue confinada por las guerras", detalló.

En la región del Pacífico, una de las más pobres y convulsas del país, operan facciones de disidentes de las FARC, el ELN y otros grupos armados ilegales que se disputan el control del negocio del narcotráfico, la minería ilegal y los vacíos dejados por la exguerrilla en la región.

EFE