Junior se fue al piso ante Nacional: empató tras tener la ventaja de dos goles
Pese al resultado, Sebastián Viera fue la gran figura.
Junior de Barranquilla quedó completamente al día en la Liga Colombiana de fútbol profesional, tras empatar 2-2 con el Atlético Nacional en un partido que dominaba por dos goles de ventaja. Con esto sentenció lo que se predecía, una total eliminación.
Junior salió al campo con lo mejor que tenía, que no era mucho. De otro lado, el local Nacional, empujado por poca afición, colocó a sus juveniles para afrontar el duelo que no les generaba mayores preocupaciones.
Desde un principio se notó que la defensa del Atlético Nacional no era infranqueable como la de otros días. La condición de alternativas se dejaba entrever entro los hombres dispuestos por Reinaldo Rueda.
Esto quedó en evidencia a los 12 minutos, cuando en una jugada de contragolpe, Vladimir Hernández dejó desparramados a dos defensores antioqueños y sirvió un sensacional pase a Michael Rangel, que disparó sin contemplaciones en el área para poner la ventaja 1-0.
Los antioqueños no se habían terminado de reponer en el mazazo, cuando otro baldado de agua fría les cayó en la cabeza: Juan Guillermo Domínguez levantó un centro como con la mano al segundo palo a Iván Vélez, quien zambulléndose en palomita introdujo la pelota en las redes.
Era un 2-0 en apenas 15 minutos, conveniente y esperanzador para el equipo de la visita. Pero, sin embargo, las cosas pronto se revertirían.
Primero con el espectacular show de atajadas del portero Sebastián Viera, que tuvo su primera gran intervención a los 19 de juego, cuando se estiró para rechazar de un manotazo un disparo que había reventado en el palo del argentino Ezequiel Rescaldani.
El momento más complicado de la primera mitad, sería cuando el Rangel quedó tendido en el piso, dando puñetazos contra el suelo. El santandereano había sufrido una distensión muscular de abductor de la pierna izquierda, por lo que salió del campo a los 22 de partido.
Desde ese momento Junior no volvió a ser el mismo. El cuadro de casa se volvió total dueño de las acciones, forzando a reiteradas actuaciones de Viera.
Como pudo, el cuadro barranquillero defendió la ventaja de dos goles hasta el medio tiempo, llegando para la segunda mitad con una buena diferencia para administrar.
Pero las diferencias se acortarían más temprano que tarde: a los 54 de partido, el juez central sancionó un claro tiro penal tras una falta de Alexis Pérez sobre el delantero Arley Rodríguez.
Frente a la pelota se paró el volante Mateus Uribe, que sin contemplación fusiló a Viera que alcanzó a adivinar el palo, pero no pudo llegar ante el potente zapatazo del ejecutor.
Hubo momentos en los cuales Junior pareció emparejar el camino, pero la insistencia verdolaga pronto lo dejé en jaque: a los 78 minutos fue expulsado Deivys Balanta, tras doble amarilla.
El mate, o en este caso el empate, llegaría en la clausura del partido. Tras un desborde de Juan Pablo Nieto, quien centró al corazón del área donde un solitario Alexis Henríquez, que llegó como centro delantero, la empujó en el fondo de la red, a los 86 minutos.
Al final, el partido fue la radiografía de Junior en el semestre: sin nómina para afrontar los momentos más difíciles y con jugadores por debajo de las situaciones. Siempre amparados en las manos salvadoras de un Viera que no las puede atajar todas.
Junior ahora enfila su preparación para el partido de ida de la gran final de la Copa Águila. El duelo se disputará ante este mismo rival el domingo a las 7:00 de la noche en el Atanasio Girardot.