El Carnaval de Barranquilla está celebrando este 7 de noviembre quince años de haber sido declarado Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en sesión especial celebrada en París en 2003.

La coreógrafa Gloria Peña, en este entonces, fue la encargada de dirigir el espectáculo ‘El esplendor del Carnaval’, que llevó a Francia junto a una delegación de 51 actores y hacedores de la fiesta.

Esta presentación fue crucial para que los miembros de la Unesco aprobaran la declaratoria porque ellos, según Peña, “no solo querían leer los documentos escritos, que ya habían sido corroborados, sino también ver con sus propios ojos lo que era un Carnaval”, contó a Zona Cero.

De ese momento Peña recordó que le “temblaban las piernas” y que su “corazón le saltaba”.

La Unesco declaró que El Carnaval de Barranquilla fuera patrimonio de la Humanidad porque reúne expresiones emblemáticas de la memoria e identidad del pueblo barranquillero, del Caribe colombiano y del Río Grande de La Magdalena, según el acta expedida en 2003.

“Para llegar a estar ante la Unesco fue un largo proceso que empezamos a desarrollar. En el espectáculo ‘Esplendor del Carnaval’ reunimos a muchos carnavaleros que fueron apoyados por la Fundación Mario Santo Domingo, por Pablo Gabriel Obregón, quien hacía parte de la Junta Directiva de la Unesco en París”, explicó la coreógrafa.

“Ya era ese el momento de darle al Carnaval de Barranquilla la posición como la fiesta más importante del país entonces teníamos la responsabilidad de llevar un espectáculo de impacto”, resaltó.

Para ello, Gloria no buscó a bailarines de academia sino a carnavaleros experimentados. “Llevamos a aquellos que bajo el sol bailaron en las calles en la Batalla de Flores y la Gran Parada y tuvimos que adaptar esos actores a que ya no bailaran en la calle sino en un escenario. Quería que fueran los auténticos carnavaleros”, destacó.

El evento se llevó a cabo en la sala número uno de la Unesco en París donde estos 51 artistas llevaron su ‘Esplendor’ ante un aforo de 1.500 personas y luego en una gira que recorrió 11 países. La Reina del Carnaval de ese año fue Olga Lucía Rodríguez Pérez y el Rey Momo Ubaldo Mendoza quienes estuvieron presentes ese día.

Una preocupación

Sin embargo, pese al logro obtenido, en la actualidad, Gloria Peña siente “miedo” porque asegura que el verdadero sentido de la fiesta se está perdiendo.

“Sigo peleando por la causa del Carnaval porque no se puede perder esa verdad que allá mostramos en París. Se está perdiendo la esencia verdadera de la fiesta”, advirtió.

Lamentó que la música extranjera se esté robando al público carnavalero.

“Se está perdiendo lo que es el Carnaval y se está irrespetando al verdadero autor de la fiesta. Tengo miedo  de que el día menos pensado el Carnaval sea multado por la Unesco sino se siguen con los compromisos de la declaratoria y le hago un llamado a Carnaval porque debemos tener mucho cuidado con la música foránea que nos invade y preservar solo auténtico”.

Gloria Peña también se expresó a favor a la conmemoración este año del centenario del nacimiento de Esthercita Forero, quien para ella  fue “la mujer que personificó verdaderamente al Carnaval”.

La coreógrafa también lamentó que esa delegación, aún después de 15 años de haber sido embajadores del Carnaval ante la Unesco, no haya recibido ningún reconocimiento, por parte de la ciudad o del departamento. “Ellos no han sido condecorados ni por el Concejo ni la Asamblea y ya es hora de que sean reconocidos públicamente”, afirmó.

Gloria Peña actualmente está terminando su biografía en la que contará las memorias de lo que fue ese evento histórico para la ciudad y para el país.

“Dejo ese legado. Hoy me siento más orgullosa porque llevamos a los auténticos carnavaleros que hicieron más grande al Carnaval en el mundo”, concluyó.