El carnaval de Notting Hill celebra su día grande al ritmo de los tambores
Cerca de un millón de personas asistieron hoy lunes -festivo en el Reino Unido- al que es considerado el mayor festival callejero de Europa.
El popular carnaval de Notting Hill, en el oeste de Londres, vivió hoy su "día grande" con un desfile repleto de color y ritmos caribeños y bajo una fuerte presencia policial, la más elevada de los últimos seis años.
Según datos facilitados a Efe por la Policía Metropolitana de Londres (Met), cerca de un millón de personas asistieron hoy lunes -festivo en el Reino Unido- al que es considerado el mayor festival callejero de Europa, y que congrega tanto a turistas como a locales en ese barrio de la capital británica.
"Es un evento maravilloso, llevo muchos años viniendo y se lo recomiendo encarecidamente a todo el mundo", dijo a Efe Sophie, que prefirió omitir su apellido, que asistió con su hija y su nieta.
En esta ocasión, la lluvia dio una tregua para despedir este evento por todo lo alto, después de que las fuertes precipitaciones de ayer empañaran la jornada dedicada a las familias.
Para garantizar que la celebración transcurriera sin altercados, la Met desplegó a unos 7.000 agentes en la zona y dispuso detectores de cuchillos en los alrededores de Notting Hill, para disuadir a aquellos que pudieran planear llevar algún tipo de arma blanca.
"Aunque no existe una amenaza específica para este evento, estamos manteniendo la situación bajo revisión constante", aseguró la superintendente Elisabeth Chapple.
"Creo que es el año que más seguridad he visto, sin contar el de los atentados en el metro de Londres (2005)", reconoció Sophie, quien, aunque nació en el Reino Unido, tiene raíces jamaicanas.
De hecho, en las principales calles por las que transcurrió el desfile era habitual encontrarse con controles policiales.
La Policía informó hoy de que el domingo detuvo 126 personas, por supuestos delitos relacionados con la posesión de drogas, armas blancas, desorden público y agresiones sexuales, y requisó 16 cuchillos durante el carnaval.
Al igual que sucedió el domingo, hoy la música paró durante 72 segundos para recordar a las víctimas del incendio de la torre residencial Grenfell, un edificio cercano a Notting Hill, donde 72 personas perdieron la vida en junio del pasado año.
Los vestidos repletos de plumas, lentejuelas y colores vivos se movieron durante toda la jornada al ritmo de los tambores, que animaron a los asistentes, muchos de los cuales no dudaron en unirse a los participantes y bailar samba, merengue o reggae.
Decenas de carrozas de diferentes organizaciones, tanto caribeñas como británicas, también tomaron parte en el desfile, que logró, por unas horas, transformar en el Caribe las calles del vecindario.
Los puestos de comida tradicional caribeña son otro de los ingredientes que hacen de este evento uno de los más aclamados.
El pollo al estilo jamaicano, la ensalada de chayote o el plátano frito fueron algunos de los manjares que impregnaron de aromas exóticos cada esquina de Notting Hill, reconocido hoy en día como uno de los más elegantes de la ciudad.
Con este desfile, Londres se despidió un año más de su carnaval más aclamado, que goza de una popularidad especial desde el estreno de la taquillera película "Notting Hill" (1999), que protagonizaron el actor británico Hugh Grant y la actriz estadounidense Julia Roberts.
La primera festividad se celebró en 1959 en St. Pancras -ubicado en el norte de Londres- con el objetivo de incentivar las relaciones entre británicos y caribeños.
En 1966, el carnaval se trasladó al barrio de Notting Hill y, desde entonces, su fama no ha dejado de aumentar.
En la actualidad, este evento se ha convertido en una gran celebración multicultural en el que la diversidad étnica, gastronómica y musical es la norma.
Lucía Gallo- EFE