Colombiano Esteban Cortázar celebra 10 años de moda y alegrías en París
Recicló y readaptó piezas de sus anteriores colecciones.
Con tan solo 33 años, el diseñador colombiano Esteban Cortázar puede presumir de tener una de las firmas más valoradas y consolidadas de la pasarela parisina, donde hoy presentó una colección otoño-invierno 2017/2018 que fue un canto a la moda pero, sobre todo, un himno de la alegría.
En su propuesta, trató de experimentar haciendo una revisión de los códigos de la marca y poniéndolos directamente en relación con el mundo que nos rodea: la migración es la clave del intercambio de ideas y culturas que se apreciaron en cada tejido y el reciclaje sirvió para recuperar y readaptar piezas de archivo de la firma.
Cortázar, preocupado por el "momento intenso" que vivimos, trató de ofrecer prendas divertidas para lanzar un mensaje "positivo y de paz", como él mismo explicó a tras el desfile.
"Quería divertirme, que las niñas se divirtieran. Esto marca los diez años que yo estoy aquí en París entonces es una noria de memorias y de inspiraciones, de aventuras, de mezclarlo todo y pasarlo bien", dijo.
No faltaron las gabardinas y faldas de piel ni los pantalones estrechos y acampanados, símbolo de la casa, pero hubo nuevos detalles como el estampado de tartán, que introdujo en pantalones y chaquetas con una mezcla de alpaca y nailon.
El colombiano añadió también lo que él llama "neo-prints", en satén, que en este caso se trató de una original composición de fotografías de su propia cuenta de Instagram, decorando tops ajustados y un espectacular abrigo tipo bata con detalles de pelo en verde botella, la prenda estrella de la colección.
El diseñador propuso bombers y chaquetas de aviador en una mezcla de estampados con tartán y "jacquard"; los vestidos, con volante en la falda, parecían creados a partir de un sinfín de "patchwork" combinados con botas mosqueteras, que se llevaron también cargadas de dibujos.
Las formas preferidas de Cortázar, la asimetría, las superposiciones y las transparencias, se unieron en esta ocasión a una apuesta por el neopreno en satén en azul marino, con accesorios fluorescentes, en chaquetas y vestidos cócteles.
EFE