El frente 36 de las disidencias de las FARC anunció en un comunicado conocido en la mañana de este jueves, que acogen la petición del Presidente de la República, Gustavo Petro, de un cese al fuego multilateral y abrir camino a diálogos de paz.

De acuerdo con información de la Gobernación de Antioquia y el Ejército, este grupo criminal tiene sus rentas ilegales y generan hechos de violencia y control en zonas rurales de los municipios de Ituango, Briceño, Anorí y Campamento.

En el comunicado explican su interés en pactar su transición hacia la legalidad, pese a que en 2016 se adelantó un proceso de paz, del cual se separaron.

“Hemos confiado infinidad de veces en salidas de negociación y políticas para este conflicto, y así lo dice nuestra historia de resistencia como pueblo azotado en armas, y lo seguiremos haciendo. De cada tropiezo y error hemos aprendido y no cerramos nunca las puertas. Creemos que la paz se edifica sobre la solución de las necesidades”, afirma el escrito.

Además, el frente 36 del grupo armado invitó a otros actores armados a unirse al cese al fuego y señalaron que ya tienen el nombre de los delegados que se sentarán junto a los representantes del Estado, pero que los darán a conocer oportunamente.

Por último, aseguran que, con esta decisión, muestran el compromiso de dejar de disparar en las montañas de Antioquia en medio de la guerra indiscriminada que se vive en estas tres subregiones del departamento, e iniciar con este gesto, pedido por el Gobierno Nacional, un sometimiento a la justicia.

Esta noticia se da en medio de la reunión que tendrá el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, y el alto comisionado para la paz, Danilo Rueda, para definir la hoja de ruta en la ciudad del proyecto de acogimiento a la justicia y desvincular a jóvenes de las más de 350 bandas delincuenciales.

Este encuentro se llevará a cabo este jueves para conocer los pormenores de la reforma a la ley de orden público que fue radicada por el Gobierno del presidente Gustavo Petro en el Congreso.