Los precandidatos presidenciales Humberto De la Calle y Óscar Iván Zuluaga, quienes representan a la ‘Coalición de la Esperanza’ y al Centro Democrático, en ese orden respectivo, se enfrascaron en una agría polémica.

Lo anterior, a raíz de unas declaraciones del segundo, que De la Calle respondió en su cuenta de Twitter.

En sus declaraciones Zuluaga sugirió que el negociador del proceso de Paz en La Habana con las FARC, coadyuvó al aumento en el país de los cultivos de coca por parte de esa guerrilla.

“Llevamos 11 años sin fumigar, estamos entregándoles todo. Cuando se estaba negociando en La Habana, Humberto de la Calle casi que les decía a las Farc que sembraran coca”, expresó el precandidato uribista a la presidencia a la revista Bocas.

De la Calle no se quedó con ese ‘jab’, y ripostó casi inmediatamente con una carta que publicó en Twitter, en la que considero las declaraciones de Zuluaga “ataque furioso e injurioso”.

“Su fórmula frente a los cultivos ilícitos se resume en glifosato y bala”, sentenció De la Calle.

“Es la política que ha imperado sin éxito en las últimas décadas. Ahora usted la plantea también como mecanismo para que la gente vote emberracada”, añadió.

Más adelante replicó De la Calle, que Zuluaga estaba cegado por una sed de poder que se sumaba a la sevicia por conseguir votos.

“Es por tanto una fórmula triplemente oprobiosa: por su secuela de violencia y muerte, por su utilización electoral y por su ineficiencia. Ese es el paisaje desolador que usted propone. Y lo hace calumniando a quienes logramos un acuerdo sensato que, desafortunadamente, quedó en manos de su partido, de modo que su ejecución quedó estancada”.

Luego agregó: “Hasta el gobierno norteamericano en su reciente política propuso una solución integral, dejando atrás las ideas suyas. Su afirmación aparece cuando la Corte Penal y hasta el gobierno han apoyado el Acuerdo en relación con el elemento de justicia. ¡Qué inoportuno desacierto el suyo!”.

Humberto De la Calle hizo alusión también al acto de sabotaje por parte de un grupo de personas que no le permitió a Oscar Iván Zuluaga llevar a cabo en Bogotá una entrevista al aire libre con una canal de televisión.

“Ahí le dejo esa lección a ver si le sirve para limpiar su odio”, aunque le recordó que él rechazó ese acto.

Para finalizar el exvicepresidente escribió: “Creí que su cantinflesca aparición reciente, en la que esparcía desinfectante, buscaba limpiar su mente y liberarla de ese fardo de rencor. Hoy veo que realmente era una puesta en escena de su obsesión por el glifosato”.