"Acabe la extorsión, entierre el fusil": Presidente Petro a alias 'Iván Mordisco'
“El negocio del coltán de nada sirve, el negocio de la cocaína de nada sirve, si se quema la selva”, agregó.
El presidente Gustavo Petro rechazó este sábado las amenazas ejercidas por el grupo armado ilegal liderado por alias ‘Iván Mordisco’ en contra de las comunidades que están firmando los acuerdos del programa ‘Conservar Paga’, que les brinda a las familias un incentivo por conservar el bosque y ayudar a frenar la deforestación en la selva amazónica.
El mandatario se refirió a este tema en San José del Guaviare, durante la clausura de la gira ‘Salvemos la selva, Conservar Paga’, donde denunció que ‘Mordisco’, cabecilla de las denominadas disidencias de las FARC, en un intento de extorsión al gobierno, pretendía continuar con sus negocios ilícitos a cambio de permitir el funcionamiento de los programas orientados a detener la deforestación y brindar alternativas económicas a la población.
En este sentido, el mandatario expresó: ¿Para qué amenazan a los campesinos, si lo que hay que salvar es a la humanidad? ¿Alguien ha pensado por ahí que el negocio del coltán y el negocio de la cocaína y el negocio del oro ilícito se puede sostener en el tiempo cuando la humanidad va muriendo?”.
“El negocio del coltán de nada sirve, el negocio de la cocaína de nada sirve, si se quema la selva”, lo cual es “la antesala de la muerte de toda la humanidad en el planeta Tierra”, sostuvo.
En relación con las pretensiones de ‘Iván Mordisco’, el jefe de Estado precisó: “Hay quien se le ocurrió pensar que porque el gobierno traía ese punto a la mesa, entonces se podía extorsionar al gobierno, diciendo: sí, negocien conmigo, déjenme traquetear, cese al fuego y no me molesten, pero yo no ceso el negocio y por tanto quemo la selva si no me dejan el negocio”.
Al respecto, el presidente Petro manifestó de manera enfática: “Eso no es una extorsión contra Petro, eso no es una extorsión contra el primer gobierno popular de Colombia; eso es una extorsión contra la humanidad entera”.
Y recalcó: “Esto no es para que se nos extorsione: Ah, usted, Petro, quiere la selva y quiere la paz, págenos, denos las rutas, permítanos seguir en el business”.
Acto seguido, el mandatario le dio un “no” rotundo como respuesta al cabecilla y le planteó que, mejor, ayude al progreso de la región, contribuyendo a transformar la economía del territorio, para que pase de la cocaína, el coltán y el oro ilícito, al turismo de naturaleza, la bioeconomía y la siembra de alimentos en la Altillanura.
En este sentido, el presidente Petro afirmó: “A ‘Mordisco’ yo le digo: hablemos. Si quiere, habla conmigo. Ve la cara del que quiere matar. Así me tocó con Carlos Castaño una vez. Venga donde quiera, y hable, hablemos, incluso de negocios. Le propongo este, que es mejor”.
“Y se abraza con el pueblo y se habla abraza con la paz y se abraza con la bandera roja, si quiere. Para eso hay que construir una democracia. Y si quiere, entonces puede ser dirigente real y civil de esta sociedad y su gente”.
El jefe de Estado le reiteró: “No lo estamos echando. Lo queremos es incluir en procesos de transformación económica regional. Pero no se mate uno con el otro y menos al pueblo y al dirigente”.
“Acabe la extorsión de inmediato. Él le dice de otra manera: el impuesto. Pero acabemos el impuesto y la extorsión. Entierre el fusil, si quiere, y hagamos prosperar esta región”, subrayó el mandatario.
De acuerdo con el presidente Petro, si ‘Mordisco’ “se vuelve protagonista, como uno de los tantos líderes y lideresas que pudieran haber aquí, firmando con el mundo, no solo conmigo, sino con el mundo, una declaración unilateral de Estado, en donde el mundo se compromete -por la importancia de la selva amazónica- a cuidar financieramente este territorio, logrando que cada familia de aquí pueda vivir decente y dignamente, pues yo lo invitó a que firme eso”.
“Se convertiría en una persona que pasaría la historia como un promotor de la vida en el planeta, y no en lo que empieza a ser: un simple bandido al que la gente no quiere, que la gente quisiera que se vaya rápido”, dijo.
“Ese no es el destino de un hombre. El destino de un hombre es ser querido por su pueblo, ser querido por su familia, ser querido por sus hijos, ser recordado como un hombre que aportó hacia adelante y no quiso destruir, hacia atrás, lo que tenía que ser la prosperidad de su propio pueblo”, concluyó el presidente de la República.