Tras ser liberada por China, Liu Xia, la viuda del Nobel de la Paz Liu Xiaobo, llegó a Berlín
Luego de pasar ocho años bajo arresto domiciliario, sin apenas contacto con el exterior, sin estar acusada de ningún delito.
Liu Xia, escritora y viuda del Nobel de la Paz y disidente chino Liu Xiaobo, llegó hoy a Berlín, en cuyo aeropuerto de Tegel aterrizó en un vuelo procedente de Helsinki hacia las 16.55 hora local (14.55 GMT).
Liu, que partió de Pekín e hizo escala en la capital finlandesa para tomar el vuelo de Finnair AY1437, llega a Alemania para recibir tratamiento médico tras pasar ocho años bajo arresto domiciliario, sin apenas contacto con el exterior, sin estar acusada de ningún delito.
La escritora fue recogida por dos furgonetas de la marca Volkswagen al pie del avión y abandonó directamente el aeropuerto berlinés sin pasar por la terminal de salidas, donde le esperaban una veintena de fotógrafos y periodistas, además de varios simpatizantes.
Tres miembros de Amnistía Internacional acudieron a la salida A05 del aeropuerto de Tegel con carteles en los que se daba la bienvenida a Liu en inglés y chino.
Poco antes, esta ONG había emitido un comunicado en el que calificaban de "maravillosa" la liberación de Liu y el fin de su "persecución y detención ilegal a manos de las autoridades chinas".
En este mismo sentido se posicionó Reporteros sin fronteras, organización que se dijo "aliviada" por la salida de Liu de China y criticó su detención injustificada y exigió asimismo a Pekín que permita la salida del país del periodista Gao Yu.
El Gobierno alemán, por su parte, no ha emitido ningún comunicado en relación a la llegada de Liu.
Al aterrizar en Tegel, el avión de Liu se cruzó en la pista con el aparato oficial del primer ministro chino, Li Keqiang, un Boeing 747 de la compañía estatal Air China, que tras tres días de visita oficial en Berlín abandonó poco después Alemania.
Li y la canciller alemana, Angela Merkel, mantuvieron ayer una intensa agenda común pero en sus comparecencias ante los medios no hablaron en absoluto de la situación de la escritora, y apenas de derechos humanos en general.
No obstante, ambos habían abordado esta cuestión en la última visita de la canciller a China, el pasado mayo.
La liberación de la poetisa se produjo tres días antes de que se cumpliese un año del fallecimiento bajo custodia de su marido, una muerte que conmocionó al mundo pues China se había negado a liberarlo aunque padecía un cáncer terminal.
Desde la muerte de su marido, la presión internacional para exigir a Pekín la libertad de Liu había aumentado, especialmente después de que ella misma, aquejada de una fuerte depresión, asegurara el pasado mayo que estaba dispuesta a morir en su casa.
"Ella viajó a Alemania por voluntad propia para recibir tratamiento médico", comunicó hoy en rueda de prensa Hua Chunying, portavoz del Ministerio chino de Exteriores, que habitualmente evita responder cualquier pregunta sobre este caso.
EFE