La travesura de un niño de 2 años en Utah, Estados Unidos, será muy difícil de olvidar por parte de sus padres, que todavía se lamentan de haber dejado a la mano la trituradora de papel.

En un descuido el niño tomó mil sesenta dólares que habían ahorrado sus padres y así como los veía destruir papeles el niño pasó los billetes por la máquina. Cuando se dieron cuenta sus papás, ya era demasiado tarde.

Según contó, a través de Twitter su papá Ben, él con su esposa Jackee Belnap ahorraron el dinero para pagar las entradas de fútbol en Utah.

"Sacamos nuestro dinero ayer para pagar a mi madre por la temporada... Bueno, no pudimos encontrar el sobre hasta que mi esposa revisó la trituradora", contó.

En total fueron 1.060 dólares. "No estoy detrás de ningún tipo de ayuda", sostuvo el padre del niño.

Ellos enviarán el dinero a la Oficina de Grabado e Impresión del gobierno de Estados Unidos que analiza casos como estos, en los que se reemplaza el dinero dañado con billetes nuevos. El proceso puede demorar hasta tres años.