El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, entregó este martes 1.752 fusiles a la Policía para avanzar en su lucha contra la inseguridad, mientras mantiene la declaratoria de "conflicto armado interno" contra las bandas criminales, a las que cataloga como "terroristas".

"La lucha que estamos llevando adelante en contra de los grupos narcoterroristas, continúa. Hoy más que nunca debemos seguir demostrando a todo el país que estamos transitando por el camino correcto, luchando incansablemente por ese nuevo Ecuador que tanto anhelamos", dijo en la ceremonia de entrega.

Añadió que han combatido a diferentes grupos delictivos, "deteniendo a cabecillas de grupos terroristas de alta peligrosidad, incautando, droga, armas" y que permanecen "firmes en el combate de las mafias".

"No vamos a parar hasta conseguir la libertad de todo el Ecuador. Estamos aquí para seguir fortaleciendo las capacidades de la Policía con esta entrega de equipamiento", dijo en referencia a los 1.752 fusiles calibre 5,56 y 30 fusiles de alta precisión.

Con ese armamento -anotó- la Policía podrá "responder a las amenazas de quienes atentan contra la integridad de los ciudadanos".

"Tienen todo el apoyo del Gobierno y de todos quienes queremos un mejor futuro para nuestras familias y nuestras futuras generaciones. Junto a ustedes nos jugamos la vida por nuestro país y nada nos va a detener", aseveró.

Noboa -que se prevé se postule para las elecciones presidenciales de 2025- consideró que "hay varios políticos que ya están en campaña y que quieren llegar al poder de la única forma que conocen: engañando y pretendiendo que el viejo país regrese".

"Pero no va a pasar -advirtió- porque los ecuatorianos ya estamos cansados de la corrupción y de ese viejo Ecuador. Asumimos con determinación el desafío de superar la crisis económica, la crisis de seguridad, la falta de empleo que nos dejaron el pasado y nada nos va a detener".

De su lado, la ministra del Interior, Mónica Palencia, indicó que ahora no solo defienden la patria del "terrorismo verbal que nos quieren vender inseguridad cuando vamos progresando, no solo del terrorismo verbal que quiere desestabilizar a un Gobierno de lucha abierta y franca contra la pobreza, el desempleo y la inseguridad".

"Hoy (...) nos toca defender a la patria de ese terrorismo que desestabiliza las estructuras, del crimen organizado, de los grupos armados diversos, de la delincuencia común, de las ratas y de los rateros", comentó.

Mencionó que deben hacer frente a los secuestros, a las extorsiones al pequeño comerciante, al hombre de a pie, así como hacer frente a los asesinatos y a otros muchos delitos "que desestabilizan al Estado y a las familias ecuatorianas, y que tienen relación con fuentes de financiamiento internacional, ocultamiento de delitos, y que han hecho del crimen una forma de política también".

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"Nos toca hacer frente al narcotráfico y sus tentáculos en las diversas instituciones públicas y privadas, y también en los espacios políticos", indicó la ministra.

Agregó que se debe exigir "el fin de la impunidad, hacer un llamado a la función judicial, al Consejo de la Judicatura, para que paren ya los argumentos pseudo-jurídicos de tinterillos" que, según indicó, están "llevando a sacar de la cárcel, y a poner libremente a muchos de los delincuentes que la Policía está aprehendiendo".

EFE.