Elliot Senseman, de 27 años, falleció luego de que su mascota, una boa de unos cinco metros de largo, se enredó en su cuello y lo asfixió. 

El hecho se registró en Pensilvania (Estados Unidos) la semana pasada, pero hasta el pasado domingo se conoció el triste final del joven.

Según informaron medios locales, “el exótico animal lo estranguló dentro de su casa cuando le cambiaría su tanque para alimentarla y darle agua”.

Acto seguido, las autoridades tuvieron que dispararle con lamento al reptil, pero no se pudo prevenir el contratiempo.

Asimismo, señalaron que un amigo cercano a la familia dijo que Senseman habría rescatado a esta boa de un hogar donde la maltrataban y tenía una alta experiencia manipulando serpientes.

Elliot fue trasladado al hospital, donde le detectaron "lesión cerebral anóxica" y una "falta total de oxígeno en el cerebro".

Finalmente, un médico forense determinó que su muerte fue un accidente.