Israel niega autoría de bombardeo que mató 500 personas en hospital de Gaza y lo atribuye a la Yihad Islámica
Dice que fue un lanzamiento fallido de cohetes por parte de milicianos.
El Ejército israelí dijo este martes que la explosión que causó la muerte de 500 palestinos en un hospital de Gaza se debió a un lanzamiento fallido de cohetes por milicianos del grupo Yihad Islámica Palestina (YIP) hacia Israel, mientras que las autoridades de Hamás acusan a Israel del ataque.
Un portavoz del Ejército israelí aseguró que "múltiples fuentes de Inteligencia indican que la Yihad Islámica es responsable del lanzamiento fallido del cohete que impactó en el hospital".
"Un análisis de los sistemas operativos del Ejército israelí indican que terroristas dispararon una ráfaga de cohetes en Gaza que pasaron muy cerca del Hospital Al Ahli en el momento en que sufrió el impacto", aseguró un portavoz militar israelí en un comunicado.
Poco después, la misma fuente señaló que "tras nuevas investigaciones y análisis cruzados, es claro que las Fuerzas de Defensa de Israel no bombardearon el hospital en Gaza".
Un comunicado militar denunció además que "las organizaciones terroristas dentro de la Franja de Gaza disparan de forma indiscriminada hacia Israel" y detalló que, desde el comienzo hace 11 días de esta guerra, "aproximadamente 450 cohetes lanzados hacia Israel cayeron dentro de Gaza, poniendo en peligro y perjudicando las vidas de sus residentes".
Esta tarde, unos 2.000 civiles se refugiaban en el centro sanitario, perteneciente a la Iglesia Anglicana y en el centro de la ciudad de Gaza, cuando una explosión acabó con la vida de al menos 500 personas en la que es la mayor masacre en la Franja tras cinco guerras entre las milicias palestinas e Israel desde 2008.
El movimiento islamista Hamás, que controla de facto el enclave, acusó al Ejército israelí de perpetrar una "horrible masacre" que "dejó cientos de víctimas en un crimen de genocidio".
Por su parte, la Autoridad Nacional Palestina (ANP), con poder limitado en Cisjordania ocupada, acusó también a Israel de cometer "un crimen horrible en una guerra genocida", y su primer ministro, Mohamed Shtayeh, instó al Consejo de Seguridad de la ONU a acabar con la contienda, y criticó a "los países que apoyan a Israel".
En escaladas bélicas pasadas, las milicias palestinas lanzaron cohetes a Israel que cayeron dentro de Gaza, y según Israel y medios locales, Yihad Islámica lanzó proyectiles que incluso mataron a palestinos en enfrentamientos anteriores, aunque no hay precedentes de proyectiles que causaran cientos de muertos como el de hoy.
Hasta el incidente de esta tarde, se desconocía también si las milicias palestinas tenían arsenal con capacidad de provocar este nivel de daños, en una explosión con tal nivel de fallecidos que podría parecer más propia de un misil.
Las fuerzas israelíes han bombardeado incesantemente sobre Gaza en los últimos once días, desde que estalló la guerra con Israel tras el ataque por sorpresa de Hamás del pasado 7 de octubre que dejó al menos 1.400 muertos en territorio israelí.
Por su parte, los ataques aéreos de Israel sobre la Franja han ocasionado al menos 3.000 muertos, la mayoría civiles y casi dos tercios de ellos mujeres y niños.
La Yihad Islámica es el segundo grupo con mayor fuerza militar en Gaza tras Hamás, y en agosto de 2022 y mayo de 2023 luchó sola contra Israel en dos escaladas bélicas de varios días.
La masacre de hoy sucede horas antes de la visita prevista mañana a Israel del presidente estadounidense, Joe Biden, que hasta ahora ha cerrado filas con Israel y respaldó "su derecho a defenderse".
EFE