Dos militares de EE.UU. mueren a disparos de un soldado afgano
El atacante falleció abatido por disparos de otros militares.
Al menos dos militares estadounidenses murieron este sábado y otros dos resultaron heridos en una acción insurgente perpetrada por un soldado afgano en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, informaron fuentes oficiales.
"Un soldado (afgano) abrió fuego contra soldados estadounidenses en la zona de Pekha, en el distrito de Achin. Según nuestra información sobre el terreno, como resultado del ataque dos soldados estadounidenses murieron y dos fueron heridos", dijo a Efe Attaullah Khogyanai, portavoz del gobernador de Nangarhar.
El atacante falleció abatido por disparos de militares de EE.UU., añadió.
El incidente tuvo lugar hoy por la tarde en el distrito de Achin, en Nangarhar, considerado uno de los bastiones del Estado Islámico (EI) en Afganistán y donde EE.UU. lanzó en abril el proyectil GBU-43, conocido como "la madre de todas las bombas", que produjo cerca de un centenar de bajas al grupo yihadista.
Un portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, reivindicó el ataque contra el contingente estadounidense a través de su cuenta en la red social Twitter.
"Hoy por la tarde, a las 13.00 horas en el distrito de Achin, un infiltrado muyahidín atacó a soldados estadounidenses, matando a cuatro", indicó en el mensaje en el que también confirmó la muerte del atacante.
La formación insurgente tiende a ofrecer información sesgada sobre el alcance de sus acciones.
Un miembro del servicio de comunicación de las fuerzas de la OTAN y de EE.UU. en Afganistán, Damien E. Horvath, indicó a Efe que se encuentran al tanto de "un incidente en el este de Afganistán", aunque no ofreció más detalles.
El último ataque perpetrado contra fuerzas de seguridad con ayuda interna en Afganistán tuvo lugar en marzo, cuando nueve policías murieron en un puesto de control de la provincia de Kunduz (norte) después de que un infiltrado facilitase a los insurgentes la entrada a las instalaciones.
De acuerdo con datos de Estados Unidos, entre enero y noviembre de 2016 se registraron 56 ataques de miembros de los cuerpos de seguridad contra sus compañeros, con un resultado de 151 muertos y 79 heridos.
La violencia en Afganistán se ha intensificado durante los últimos dos años, tras el final de la misión de combate de la OTAN, que continúa en el país en misión de asistencia y capacitación de las tropas afganas con 13.000 soldados, de los que EE.UU. tiene previsto mantener a 8.400 militares este año.
En este momento el Gobierno de Afganistán controla apenas el 57 % del territorio del país, según el Inspector Especial General para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR) de Estados Unidos.
EFE