Uno de los ocho jóvenes desaparecidos cuando viajaban del Eje Cafetero, en el centro de Colombia, a la costa atlántica para conocer el mar, fue rescatado por la policía en el municipio de Cáceres, departamento de Antioquia (noroeste), informaron este lunes fuentes oficiales.

Se trata de Mauricio Ramírez, de 21 años, quien se encontraba desaparecido junto a otras siete personas en la región del Bajo Cauca antioqueño desde el pasado 26 de febrero.

Según la Policía Nacional, miembros de los comandos Jungla y Gaula de esa institución lograron "ubicar a uno de los jóvenes oriundos del departamento de Caldas en zona rural del municipio de Cáceres, Antioquia, sector los Lloros".

Retenidos por un grupo armado

El joven aseguró a las autoridades que el grupo viajaba subido sobre la carga de un camión en compañía de otras personas y cuando el vehículo se detuvo en una gasolinera llegaron hombres armados que los condujeron a un muelle sobre el río Cauca y luego fueron "desplazados a un lugar desconocido".

En ese lugar al parecer fueron entregados a presuntos integrantes del grupo armado Los Caparros, una banda criminal de fuerte presencia en esa región.

Según la Policía, hombres de esa banda criminal manifestaron a los jóvenes que habían sido reclutados y que recibirían el pago de un millón de pesos (unos 275 dólares) como paga.

Las autoridades detallaron además que Mauricio Ramírez fue abandonado en una finca porque debido a sus condiciones de salud no le era posible desplazarse durante largos periodos.

"La Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, continúa con el proceso investigativo para lograr la ubicación de las demás personas y capturar a los responsables de este lamentable hecho", agregó la información.

Víctimas de reclutamiento forzado 

La desaparición de los ocho jóvenes fue denunciada la semana pasada por autoridades locales y por la representante en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Juliette Rivero.

Los jóvenes partieron a la costa caribeña el pasado 26 de febrero, y llamaron a sus familiares por última vez cuando se encontraban en la zona de Puerto Valdivia (Antioquia), según informó entonces la Alcaldía de esa localidad.

La Alcaldía informó de la desaparición de seis jóvenes, incluidos tres menores de edad, y pidió ayuda para ubicarlos, pero luego la oficina de Derechos Humanos habló de ocho desaparecidos.

La ONU recordó que la Defensoría del Pueblo lanzó una alerta temprana en septiembre de 2018 por el riesgo para los jóvenes, niños y niñas de "vinculación, utilización y/o reclutamiento por parte de grupos armados ilegales presentes en el municipio de Valdivia".

Valdivia está en una zona que conecta las regiones del norte y el Bajo Cauca antioqueño, un paso obligado hacia la costa atlántica, por lo que es zona de interés de los grupos armados ilegales en la cadena de producción, transformación y comercialización de la coca.

Era también una zona con mucha presencia de las FARC, que con su desarme tras la firma del acuerdo de paz dejó esos territorios en disputa entre otros grupos ilegales como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) o Clan del Golfo (el mayor grupo criminal del país), y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

EFE