Carlos Esmir Camargo Piedrahita fue presentado, de nuevo, en la mañana de este viernes para la continuación de la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento tras haberle sido imputado los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de armas, por ser el presunto autor intelectual del crimen de su amigo Jonathan Gutiérrez Castro, asesinado a bala el 12 de abril del presente año en las afueras de una tienda, ubicada en la calle 43 con carrera 51, en el Barrio Abajo. 

El imputado renunció a su abogado y para la audiencia de este viernes tuvo otro apoderado al que el fiscal previamente le entregó la carpeta con el material probatorio para que pudiera sustentar su defensa.

El abogado llevó a la audiencia documentación que indica que vecinos de Carlos Esmir lo muestran como una buena persona y amable. Además de que no posee antecedentes judiciales y que su hija depende económicamente de él. 

Sobre el testimonio de una persona que indicó a la Fiscalía que Carlos lo contactó para que buscara a los sicarios, el abogado precisó que no tiene relevancia.

No obstante, el fiscal refutó todo precisando que la hija del imputado no solo depende de su papá porque la mamá labora en la Secretaría de Educación. Además de que los vecinos pueden decir que es una buena persona pero no conocen todo el proceso que se lleva en su contra. Igualmente, que el hecho de que no tenga antecedentes judiciales no quiere decir que no haya sido el determinador del homicidio. 

Por su parte, el fiscal aseguró que sí existe inferencia razonable de autoría porque el día de los hechos cámaras de sgruidad grabaron de cerca el vehículo que conducía el imputado.

Tras escuchar a las partes, el juez dejó fijada la fecha del 27 de noviembre, a las 4 de la tarde, para decidir si envía o no a la cárcel, de manera preventiva, al imputado.

Durante la audiencia de imputación de cargos, realizada hace 8 días, el fiscal reveló que Carlos Esmir habría pagado un total de 10 millones de pesos con el fin de que un conocido contactara a unos sicarios para que mataran Jonathan.

Según las indagaciones del ente acusador, el presunto autor intelectual del crimen habría estado el día de los hechos en el Barrio Abajo en una camioneta de propiedad de su hermana para estar al tanto de primera mano de lo que iba a ocurrir. Así se evidenció en cámaras de seguridad del sector que muestran el vehículo por el barrio y que, según la Fiscalía, siempre lo ha manejado Carlos Esmir.

La hipótesis que maneja la Fiscalía indica que el imputado habría determinado el homicidio de su amigo porque había descubierto que su pareja sostenía una relación sentimental con Jonathan Gutiérrez Castro.