La Fiscalía General de la Nación tomó posesión con fines de extinción de dominio bienes en cuantía de 9 mil millones de pesos de propiedad del entonces magistrado del Tribunal Administrativo de Cundinamarca Carlos Alberto Vargas Bautista, investigado por presuntos actos de corrupción en el desempeño de sus funciones al frente del cargo, informó el ente investigador.

Las propiedades incautadas corresponden a tres fincas situadas en Icononzo, Tolima; Tibacuy, Cundinamarca; Rivera, Huila; una casa en Bogotá, un edificio en Bucaramanga, una motocicleta y cuatro automóviles.  

La Fiscalía aseguró en un comunicado que estas propiedades fueron adquiridas a través de sobornos que Vargas Bautista realizó en su condición de magistrado, y que servirán de material probatorio a los cargos que se le imputan.  

Liliana Donado, directora especializada de extinción del derecho de dominio de la Fiscalía, aseguró que en el proceso que se lleva contra el exmagistrado “hay una evidencia clara de las manipulaciones en el sistema de reparto, y otras posibles irregularidades que redireccionaron los procesos judiciales a su despacho para favorecer intereses de alguna de las partes que actuaban”.

Además, al exfuncionario también se le acusa de favorecer los intereses de las personas demandantes, quienes en su mayoría terminaron favorecidos por los intereses del estado, para lo que tenían que hacer un desembolso económico bastante considerado y cumplir así las exigencias de Vargas.  

En este entramado de corrupción la Fiscalía también reportó que el entonces magistrado actuaba junto a su primo Adelmaro Vargas, quien habría recibido millonarias sumas de dinero provenientes de los negocios ilegales.

Igualmente hacía parte de las maniobras Kelly Andrea Eslava, compañera sentimental de Vargas Bautista, quien trabajaba en una firma de abogados y hacía parte del acuerdo para que sus clientes resultaran favorecidos en los procesos.