En un centro “pirata”, que como tal no registra ningún tipo de autorización para funcionamiento, la joven Angie Carolina Mendoza Cera fue sometida a un procedimiento para aumentarse los glúteos, situación que finalmente la condujo a la muerte.

Tal es la conclusión de la Secretaria Distrital de Salud, Alma Solano Sánchez luego de indagar con familiares de Angie Carolina sobre los momentos previos a su deceso.

“No es ningún centro de estética, es una casa donde hay varios apartamentos. Allí la joven había concertado realizarse unos procedimientos”, manifestó la funcionaria.

Realmente, en el sitio, ubicado en la carrera 47 entre calles 75 y 74, no existe ningún centro de estética.

“Es un inmueble no registrado ni ha declarado ningún nombre”, advirtió la Secretaria de Salud.

En otras palabras, es como si en cualquier casa (o centro de garaje) le hubiesen realizado el procedimiento, lo que coloca nuevamente sobre el tapete los centros “piratas” que funcionan en Barranquilla y que con sus peligrosos procedimientos ponen en riesgo la integridad de quien acuden a ellos.

En este caso, agregó la funcionaria, Angie Carolina no solo había concertado la cita para practicarse el procedimiento en ese lugar sino que, además, acudió acompañada de una persona conocida de ella.

“Ella entró al apartamento y después de cierto tiempo se la llevaron al hospital”, anotó Alma Solano Sánchez.

Lo que resulta claro es que el procedimiento produjo graves complicaciones que terminaron con la vida de Angie Carolina, situación por la cual sus familiares ya instauraron la denuncia correspondiente ante la Fiscalía.