Dos niñas, de 14 y 9 años, resultaron quemadas al manipular pólvora durante la celebración de la Navidad en el área metropolitana de Bucaramanga.

El primer caso ocurrió con la de 14 años en el barrio La Cumbre de Floridablanca, sus padres la trasladaron a la Clínica Guane tras la explosión de una ‘pañoleta’ en la mano izquierda.

De acuerdo con el parte médico, la menor presenta quemaduras de segundo grado y pérdida auditiva por la onda explosiva.

El segundo caso ocurrió en el barrio Divino Niño de Piedecuesta, la información de las autoridades manifiesta que el padre de la niña estaba prendiendo un ‘volcán’ en la calle y su hija se acercó demasiado, y al explotar le causó quemaduras en el rostro.

La menor presenta quemaduras de primer grado en el lado izquierdo de la cara y quedó bajo observación médica en el Hospital de Piedecuesta.

La niña de 9 años será trasladada al Hospital Universitario de Santander para ser valorada por un médico cirujano experto en quemaduras por pólvora.

La Policía, al conocer el caso, le impuso una orden de comparendo al padre de la menor quemada en Piedecuesta.

Con estos hechos ya son 19 los quemados por pólvora durante diciembre en Santander.

“Las quemaduras con pólvora son muy graves. Recomendamos a las personas que resulten heridas con estos elementos utilizar agua para su limpieza inicial y luego ir un centro médico para su respectiva atención”, señaló el capitán Jorge Peña, de Bomberos de Bucaramanga

En lo corrido del mes la Policía Metropolitana de Bucaramanga ha incautado más de 300 kilos de pólvora.

"Son más de 1.000 unidades de fuegos pirotécnicos como ‘voladores’, ‘mechas’, ‘totes’, ‘volcanes’y ‘chispitas’", afirmó el coronel José Óscar Jaramillo, subcomandante de la Policía de Bucaramanga.