Cuando celebraba el Año Nuevo en medio de fuegos artificiales, una barranquillera murió tras caerle una bala perdida.

El hecho se registró en el sector Ersa, corregimiento de Pedregal en Panamá, donde Margarita Rosa Reyes Lobo, de 32 años, se encontraba en casa del hermano de su esposo Arley Alzate Barrios.

Después de la cena se quedaron apreciando los fuegos artificiales del sector. De pronto, Margarita Rosa se desplomó. “Pensaron que se había desmayado, pero no. Ella tenía un tiro en la cabeza”, relató su mamá, Xiomara Lobo Torres.

A esa hora, 12:40 am de domingo 1o de enero, sus familiares la trasladaron a la Policlínica de la Caja de Seguro Social, J.J. Vallarino, ubicada en el corregimiento de Juan Díaz, donde llegó sin signos vitales.

Margarita Rosa Reyes se encontraba residiendo en Panamá desde el año 2005, en busca de un mejor futuro junto con su esposo, de cuya unión nacieron una niña (10 años) y un niño (8 años).

Desde que partió a territorio panameño, Margarita Rosa no volvió a visitar a sus familiares que residen en Malambo, pero mantenía permanente contacto con ellos. La última vez fue el 25 de diciembre con ocasión de la Navidad.

Era la menor de 5 hermanos: Brayan (q.e.p.d.), Marlon, Robinson y Wilmer.

Su padre, Robinson Reyes Salinas se desempeña como profesor del Colegio Metropolitano de Soledad.

Sus familiares adelantan las gestiones para repatriar el cuerpo y darle sepultura en el municipio de Malambo, donde residen en la urbanización El Concord.

Las autoridades panameñas investigan el origen de la bala perdida que causó la muerte de Margarita Rosa Reyes Lobo.

Drama por la repatriación

Margarita, de 32 años, había nacido en Barrio Abajo, en Barranquilla, y desde los 5 años vivía con su familia en el barrio el Concord de Malambo. Pero hace 12 años decidió irse a vivir con su esposo a Panamá. 

Allá vivían en condiciones estables y aunque ella era ama de casa, su esposo tenía un buen trabajo con el que había sacado adelante a su familia. El amargo trago de esta lamentable historia que se presentó en la madrugada del pasado primero de enero, no termina allí.

Su hermano Marlon Reyes contó a Zona Cero que ahora su familia no solo atraviesa por el sufrimiento de la pérdida de Margarita sino por la preocupación que ha significado la repatriación de su cuerpo, ya que los trámites tienen un valor de 5 mil dólares, que corresponden a 15 millones de pesos. 

“Ellos viven en el sector de Pedregal. Departían en familia en la cena de nochevieja con dos hermanos de él y dos primos más. Ellos siempre se reunían para el 7, 24 y 31. El 7 el encuentro fue en la casa de uno de ellos, el 24 en la casa de mi hermana y el 31 estaban en la vivienda de otro familiar. Estaban sirviendo la comida, ella estaba hablando con una concuñada cuando de repente empezó a convulsionar. Tenía una copa en la mano y se desplomó. Ellos pensaron que era un ataque y al revisarle la cabeza era un balazo. Estaban en la terraza y por la reja entró la bala”, explicó. 

Sobre la repatriación indicó Marlon Reyes que están tratando de reunir el dinero por varios medios y que hay otros aspectos que han dificultado darle su cristiana sepultura, como por ejemplo que los niños no tienen pasaporte y que las diligencias deben hacerse directamente en Panamá, explicó Reyes. 

“Inicialmente los niños no tienen el tema de los pasaportes, mi cuñado ya tenía documentación que le permite entrar y salir y mi hermana estaba en el trámite. La suman que piden para traerla en el consulado era de 5 mil dólares que incluye que allá la preparaban, ala mandaba en el avión, el papeleo y la entrega acá en Colombia. Ahora no sabemos si los niños se quedan acá o se van, ahora estamos esperando para el entierro y después se decidirá”, comentó Reyes. 

Según contó Reyes, una prima de ellos en Bogotá se acercó al consulado, pero les informaron que los trámites deben hacerse en la embajada Colombia en Panamá. “Por esa razón ayer mi cuñado y su jefa que lo ha respaldado en todo pusieron la denuncia en la fiscalía de allá porque solo con una denuncia forma de puede agilizar el proceso, mentiras se adelantan los trámites y los estudios de balística porque su muerte fue violenta”, señaló. 

Indicó que entre hoy y mañana vence el plazo que tienen para el tramite correcto de la repatriación y por eso están haciendo el ecuador con apoyo de donaciones de amigos, de concejales y de la iglesia cristiana a la que pertenece el papá de la víctima mortal .

“Todo es complicado, aunque  tengo la plata de la funeraria en Malambo, solo que hay que traerla y estamos esperando aportes de todos los que nos están colaborando”, finalizó Marlon Reyes, quien aseguró que espera que su hermana pueda tener unas honras fúnebres lo mas pronto posible y se minimicen los obstáculos que no han permitido repatriarla.