Por lo menos 260 mil niños se encuentran presos o retenidos en estos momentos en el mundo, reveló un informe del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

Sin embargo, agregó que los registros no son confiables, y la cifra podría ser mucho mayor debido a las inconsistencias en los sistemas penales de muchos países.

El estudio fue titulado por UNICEF: 'Estimar el número de niños privados de libertad en la administración de justicia', y es el primero de estas características que se desarrolla desde 2007.

Con base en estas cifras consideradas escandalosas, la entidad de las Naciones Unidas clama una reforma de la justicia para poner fin a la detención de todos los niños.

El análisis se conoce como antesala del Congreso Mundial sobre Justicia para los niños.

UNICEF también reveló otro estudio: 'La detención de niños en la época de la Covid', que muestra desde el inicio de la pandemia de Covid-19 que más de 45.000 niños han sido liberados y devueltos de forma segura a sus familias en unos 84 países de todo el mundo, ante el riesgo que corrían de contraer el virus en espacios confinados y hacinados.

La mayoría de los casos están motivados por inmigración, conflicto armado, seguridad nacional, delitos comunes, o los que viven con sus padres detenidos.

UNICEF advirtió que los menores retenidos carecen de acceso adecuado a servicios de nutrición, atención sanitaria e higiene, y son vulnerables al abandono, abusos físicos, sicológicos y violencia de género.

Ante esta situación UNICEF ha solicitado reformas a la justicia infantil y poner fin de forma segura a la detención de todos los niños y niñas.

Pidió además, a los gobiernos y a la sociedad civil que inviertan en la difusión de información sobre los derechos legales de los niños en los sistemas de justicia y bienestar, especialmente para los menores  marginados, y amplíen la asistencia jurídica gratuita, la representación y los servicios para todos los niños.