Recibiendo las exigencias del grupo de tomistas, la Defensoría Regional del Pueblo inició su labor de mediación en la búsqueda de una solución que permita el regreso a la normalidad académica y administrativa en la Universidad del Atlántico.

La Defensora Regional, Alma Riquett Pérez, dijo, al final del encuentro, que existen unos puntos “que deben ser socializados con la otra parte”.

“Esperamos que esto se pueda resolver pronto y el proceso continúa. Somos Defensoría que garantizamos derechos. Estamos en el proceso de acercamiento con los estudiantes quienes nos expresaron unos puntos que necesitamos necesario compartirlos con la otra parte. Estamos muy positivos que de aquí vamos a sacar muchas cosas para el bien de la Universidad”, expresó la funcionaria.

Agregó que la intención de los estudiantes es la de reactivar la comisión de estudio de los estatutos.

“Vamos a planteárselo a la otra parte y esperemos que las cosas se den”, afirmó.

Por su parte, Fabián Alarcón, delegado de la Facultad de Ciencias Humanas, precisó que “fue un diálogo donde se pudieron crear canales de comunicación para conocer nuestras exigencias y darle viabilidad a toda esta situación de la Universidad”.

Señaló que decisiones como las del Consejo Académico “obstaculizan un poco el diálogo y la confianza que los estudiantes puedan depositar en la administración”.

“Es inviable comenzar clases sin garantías, un proceso de reforma por la mitad y el desconocimiento de las facultades. Nosotros llevamos tres meses y podemos seguir esperando hasta que el Consejo Superior tenga la voluntad de venir a solucionar los problemas de la Universidad”, puntualizó.