También luchamos contra ‘prácticas malignas’, que usan delincuentes: Policía
El general Henry Sanabria explica que estos métodos fueron usados para dar de baja al 'Mono Jojoy', Raúl Reyes, Alfonso Cano, entre otros.
Las prácticas de hechicería y superstición que han rodeado el accionar de algunos capos de la droga, jefes paramilitares, guerrilleros, y delincuentes del común, mostradas por las autoridades tras algunos operativos; parece que son objeto de toda credibilidad por parte del director de la Policía Nacional, general Henry Sanabria, y por tanto un frente por el que también hay que combatirlos.
Al parece entenderse después de una extensa entrevista que concedió a la periodista Vicky Dávila, que circula en la reciente edición de la revista Semana.
Allí afirma, por ejemplo, que “los exorcismos se convirtieron en un arma definitiva para combatir a los más grandes criminales”.
El alto oficial asegura también, según la publicación, que Alfonso Cano, Raúl Reyes, el Mono Jojoy, Pablo Escobar, entre otros, fueron dados de baja “cuando se les rompió la protección maligna”.
Sanabria reveló igualmente “cómo es su lucha contra el diablo”.
De acuerdo con la periodista, el general es una persona de profundo sentido religioso, que en su despacho cuenta con un crucifijo y muchas vírgenes, lo cual lo ha hecho blanco de algunas críticas.
El director de la Policía respondió que no le importan estas críticas, porque él tiene “firmeza en la fe”.
“Según el artículo 19 de la Constitución, todos somos libres de profesar nuestra fe de manera libre. Incluso, la Corte Constitucional se ha pronunciado fuertemente sobre eso, aduciendo que los servidores públicos también tienen la posibilidad de profesarla de manera pública o privada”, respondió.
Sostuvo que cuando le cuestionan su lado religioso “le encanta” por tres razones.
“La primera, porque llegan más seguidores; la segunda, porque más personas sienten ganas de leer la Biblia y, tercero, porque me santifica”.
Y explicó que en San Mateo 5, en las bienaventuranzas de Nuestro Señor, se dice: “Bienaventurados todos los que están perseguidos por causa de mi nombre, porque cuando sean calumniados y criticados habrá un premio para ellos en el cielo”.
Sobre la caída del Mono Jojoy, explicó.
“Aquí desde Bogotá se dijo: ‘Bueno, entonces vamos a hacer una operación’. Los policías que participaron en eso hicieron una oración con ellos. El sacerdote bendijo las armas del Estado con las cuales iba a ser objeto de persecución y funcionó. Claro, porque es la acción de Dios."
Así fue la entrevista sobre este tema.
¿El director era el general Naranjo?
H. S.: Sí, estaba mi general Naranjo.
V. D.: ¿Él sabía que estaban haciendo un exorcismo para dar de baja al Mono Jojoy?
H. S.: Claro. En unas interceptaciones, que se las mostramos a mi general Naranjo, hablaba una bruja. La bruja decía: “Mire, el de las naranjas y el de los pajaritos no han caído. Los otros ya cayeron, los tienen pintaditos. El otro, el de los barquitos, ya cayó. Pero los otros no han caído”.
¿A quién se refería?
"A mi general Naranjo. Le mostramos ese audio a él. A la bruja la capturamos porque formaba parte de una estructura de las Farc, con la cual ella también hablaba. Se hacía referencia a eso".
"Entonces nos preguntamos: '¿Por qué mi general Naranjo no cayó y el de la Fuerza Aérea tampoco?'. La respuesta fue: “Porque rezan, o alguien reza por ellos”. Efectivamente, la mamá de mi general Naranjo reza el santo rosario todos los días. Lo mismo la mamá de mi general Vargas"..
V. D.: ¿El general Vargas también hacía estos exorcismos?
H. S.: Él conoció eso. Precisamente era el general de las operaciones cuando pasó lo del Mono Jojoy. Al principio, por supuesto, todos son incrédulos. Pero ya cuando se les muestra… Por ejemplo, al director de Inteligencia alguien le dijo: “Mire, allá en la Dipol están haciendo unas cosas en el auditorio, para que usted se dé cuenta. Eso como que es malo”. Entonces me mandó a llamar y me dijo: “¿Usted qué es lo que está haciendo en el auditorio?”. Yo le contesté: “No soy yo, mi general. Quien lo está haciendo es el sacerdote”. Me dijo: “¿Pero qué es? ¿Exorcismo?”. Le dije: “Pues algo parecido a los exorcismos, que es la liberación”. Entonces sacó un libro y me dijo: “Mire, esto se lo traje de Roma”. Me lo entregó y decía Exorcismos. Yo lo ojeé y me dijo: “Me lo leí de Roma hacia acá, sé lo que están haciendo. Síganlo haciendo”. Le devolví el libro porque el diablo existe y nuestro señor lo ataca, por supuesto.
V. D.: ¿En qué otro operativo grande se han usado los exorcismos?
H. S.: En todos los casos contra el estado mayor de las Farc. Todo fue con exorcismo.
V. D.: ¿Contra Raúl Reyes?
H. S.: Por supuesto.
V. D.: ¿Cómo fue?
H. S.: Como estaba al otro lado, en Ecuador, y se movía hacia la frontera con Colombia, teníamos que tener el punto exacto. El sacerdote tomó la foto de Raúl Reyes e hizo una oración y rompió su acción maligna, y eso lo hizo visible. Ellos se protegen con este tipo de entidades malignas. Lo que no funcionaba empezó a funcionar y apareció la X (la ubicación exacta) donde estaba Reyes en ese momento.
V. D.: ¿Y qué pasó con Alfonso Cano?
H. S.: También funcionó el exorcismo.
V. D.: ¿Todos estos grandes cabecillas de las Farc utilizaban la brujería para protegerse?
H. S.: Sí, claro. Todos los delincuentes. Todos la usan.
V. D.: ¿Lo que hacen con los exorcismos es acabar con la protección maligna que tienen los criminales?
H. S.: Romper con eso, sí. En un caso de las Autodefensas Gaitanistas, se abatió a un blanco de ellos. Le disparaban y no caía. Entonces acordaron rezar el padrenuestro mientras disparaban.
V. D.: ¿Rezar el padrenuestro y disparar al mismo tiempo?
H. S.: Sí, claro. Antes de salir a esas operaciones se bendicen las armas y se les dice: “Disparen, pero recen”. En este caso, el intendente disparó rezando y lo abatió.