Sur del Atlántico requiere más acción de UNGRD: funcionarios vienen, ven y se van
La Administración Departamental y la CRA han asumido con recursos propios la atención de los hechos registrados en los municipios.
Los funcionarios de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres -UNGRD- se han caracterizado por sus visitas al sur del Atlántico con el aparente propósito de evaluar los daños causados por la emergencia invernal a efectos de disponer los recursos y apoyos necesarios para superar la situación.
Sin embargo, tales visitas no han tenido el resultado esperado porque desde que la temporada invernal se intensificó en los municipios del Atlántico, hasta el momento ha sido nulo el apoyo recibido.
Simplemente, los funcionarios de la UNGRD vienen, ven y se van, sin que haya una efectiva atención por parte de esa entidad.
Y es que para los habitantes del sur del Atlántico la situación se ha convertido en un verdadero drama no solo por el invierno sino también por el fracaso de la APP del río Magdalena y los reiterados aplazamientos en la otra APP para la restauración de los ecosistemas degradados del Canal del Dique, ambos megaproyectos con gran incidencia en esa zona del departamento puesto que representan inversiones en obras y labores de dragado para disminuir los riesgos de inundaciones causadas por las dos fuentes fluviales.
Situación que condujo a la Gobernación del Atlántico, ante el pronóstico de fuertes lluvias para el segundo semestre del año, a firmar un convenio con la Universidad del Magdalena para el acompañamiento técnico en la identificación de zonas vulnerables sobre el Canal del Dique, Embalse del Guájaro y ribera del Magdalena.
Fue así como a finales de junio se presentó la primera alerta de inundación del sur del departamento debido a la filtración presentada en Santa Lucía como consecuencia de la obra que adelantaba Cormagdalena y la Alcaldía de este municipio.
Como reacción inmediata se firmó convenio por $1.100 millones para la construcción de una barrera y un cerramiento con material seleccionado (sacos de arena y piedra) que permitieran proteger la obra que se adelantaba y evitar inundaciones en el municipio.
Seguidamente, en el mes de julio, fueron firmados convenios con los municipios de Manatí, Repelón, Campo de la Cruz, Candelaria y Suan por valor de $1.200 millones para que las alcaldías realizaran labores de dragados y limpiezas de canales y arroyos y así reducir el riesgo de inundaciones ante las fuertes lluvias pronosticadas. Paralelamente en este mismo mes se realizó la contratación de un operador para el levantamiento del censo de la población en riesgo.
Más adelante, entre los meses de julio y agosto, con una inversión de 200 millones de pesos fueron adquiridas bolsas big bag y material comprimido para armar muros de contención en los puntos bajos con alto riesgo de inundación. Del mismo modo, con una inversión de $267.625.403 se realizó la contratación para el mantenimiento de las motobombas y de rocería por valor de $495.492.629 para el mantenimiento de las vías que van desde Palmar hasta Las Compuertas y de aquí hasta Aguada de Pablo, para que las comunidades pudieran monitorear con facilidad los cuerpos de agua.
Todas estas acciones inmediatas fueron emprendidas por la Gobernación del Atlántico y en uno de los casos con el apoyo de Cormagdalena, brillando por su ausencia la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres.
Tampoco con el nuevo Gobierno
Tras la llegada del nuevo Gobierno, en cabeza de Gustavo Petro Urrego, el 26 de agosto se instaló la Comisión Accidental que fue conformada en el Congreso de la República para hacer seguimiento a la APP Canal del Dique, la navegabilidad del río Magdalena y la situación de emergencia y riesgo por la que atraviesan los municipios y habitantes de la zona sur del Atlántico, teniendo en cuenta que el invierno comenzó a intensificarse en este segundo semestre del año.
Y fue el 9 de septiembre cuando el propio Presidente, Gustavo Petro, visitó el municipio de Santa Lucía, donde se realizó la Mesa de Concertación Ampliada para socializar el megaproyecto del Canal del Dique con alcaldes, gobernadores de la región y comunidades ribereñas.
Ante la problemática por la que atraviesa el sur del Atlántico, Petro propuso hacer un mapa de riesgo y la reubicación de la población. Asimismo, planteó una reubicación voluntaria de la población afectada y la instalación de un comité de crisis climática.
La emergencia en El Guájaro
En seguimiento a ello, el 19 de septiembre la Gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera, realizó un recorrido por los puntos críticos del Canal del Dique, en compañía de técnicos de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo (UNGRD) y del Ministerio de Ambiente, en los sectores de Calamar (Bolívar), Suan, Santa Lucía, Las Compuertas de Manatí, Villa Rosa y el embalse de El Guájaro.
El propósito fue mostrarles las obras que se necesitan para mitigar el riesgo de inundaciones alrededor del Canal del Dique.
Fue entonces cuando el 4 de octubre aparecieron los funcionarios de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo quienes se reunieron con los alcaldes del sur y funcionarios de la Secretaría de Interior y de la Subsecretaría de Prevención y Atención de Desastres y, luego de hacer un recorrido por diferentes puntos y el embalse de El Guájaro, participaron en el Consejo Extraordinario de Gestión del Riesgo y se declaró en sesión permanente el Puesto de Mando Unificado.
En esta reunión también participaron representantes del Ministerio de Ambiente y la CRA y se declaró la alerta roja en el Embalse del Guájaro.
Como acción inmediata se le solicitó a la UNGRD el desplazamiento de dos tractobombas que se encuentran en Bolívar.
No obstante el riesgo aumentó y 4 días más tarde fue dispuesta una barricada de sacos en el corregimiento de La Peña, para mitigar la amenaza de inundación por el embalse de El Guájaro, para lo cual se contó con 100 obreros, distribuidos en cuatro cuadrillas, que la construyen con una altura de 60 centímetros, con doble fila de sacos rellenos de arena, sobre el andén del Malecón. En total, al término de la jornada del lunes 10 de octubre, se han conformado 660 metros de barrera.
En concreto, con estos trabajos se busca minimizar la entrada de agua en los sitios más bajos, ante el incremento del nivel de agua por encima de la cota de inundación de 5.20 fijada para dicho corregimiento, ubicado a orillas del Embalse del Guájaro.
Cabe señalar que el nivel del agua en el embalse, hasta este lunes, llegó a la cota 5.26 dejando otro sector de 130 metros del malecón, a 10 centímetros de llegar al nivel superior del andén, el cual fue intervenido con la construcción de la barrera de sacos. El resto del Malecón, hasta el momento, presenta unas diferencias mayores con el nivel de agua.
También en Aguada de Pablo - Las Compuertas
Al mismo tiempo, la Gobernación del Atlántico continúa con los trabajos de adecuación de una compuerta, en el canal que está en el Puente Militar, ubicado en la vía de Aguada de Pablo – Las Compuertas.
Allí, tres retroexcavadoras siguen trabajando a lo largo de los 9 kilómetros de dicho canal, retirando la vegetación flotante y sedimento acumulado, para que, una vez se adecúe la compuerta, se empiece a liberar agua del embalse de manera controlada a través del canal, que descarga a la matriz del sistema de drenaje del sur del Atlántico.
Este tramo conducirá las aguas entregadas por el canal del Puente Militar, hasta la Estación Elevadora de Boquita, ubicada a unos 7 kilómetros, que es la encargada de impulsarlas a uno trapezoidal revestido en concreto que descarga al Canal del Dique.
Convenios con Alcaldías
Es de anotar que para atender las emergencias causas por la ola invernal este año, la Gobernación del Atlántico ha dispuesto inversiones por 6.855 millones 924 mil 803, distribuidas de la siguiente manera:
Dentro de los trabajos emprendidos se encuentran los siguientes:
- Palmar de Varela. Limpieza de sedimentos en los arroyos y reparación de los box culvert.
- Tubará. Limpieza y remoción de sedimentos de los arroyos.
- Limpieza y remoción de sedimentos en arroyos y canales.
- Rocería y mantenimiento de la vía que conecta Santa Lucía con Suan, y bordea el Canal del Dique.
- Consecución de bolsas ‘big bag’ y material comprimido, para armar muros de contención en los puntos bajos con alto riesgo de inundación.
- Mantenimiento y reparación de motobombas, para retirar el agua en caso de que se presenten inundaciones.
- Tractobomba a los puntos críticos en Santa Lucía.
- Apoyo a la Alcaldía de Santa Lucía en la viabilización del proyecto para el control de las aguas del Canal del Dique que corren paralelas al mismo, luego de rebasar la cota de inundación y en la construcción de diques transversales que eviten la velocidad que produzca erosión en protecciones temporales y vías secundarias.
- Ponedera. Tras colapsar el sistema de alcantarillado al mezclarse aguas lluvias con s residuales, se firmó este 10 de octubre convenio por $2 mil 100 millones para la reposición de redes de alcantarillado
- Luego de escuchar a la comunidad, ayer lunes en horas de la tarde la Secretaría de Infraestructura del Atlántico empezó las obras de mejoramiento en el tramo de Piojó – El Vaivén – Tubará, con la llegada de la maquinaria a la zona. El contratista y la interventoría están en el sitio para hacer todos los trabajos en los distintos puntos críticos.
- En la vía que de Villa Rosa conduce a Repelón, en el sector de Loma Grande, la Gobernación hizo presencia y, de manera coordinada con el Ejército Nacional, se realizaron las labores con maquinaria pesada durante dos días en la zona, lo que permitió habilitar en el menor tiempo ese tramo carreteable para el paso peatonal y de motos. Las obras consistieron en la instalación de 3 tuberías (3 líneas cada una con 2 tubos de 32 pulgadas), se utilizaron aproximadamente 100 metros cúbicos de material seleccionado y 380 metros cuadrados de geotextil tejido. Todo ello apoyado con una capa de suelo cemento de 15 centímetros. El hueco en la vía era de aproximadamente 10 metros de largo por 10 de ancho.
- Atención a familias afectadas por lluvias en cuatro municipios, a través de la Subsecretaría de Prevención y Atención de Desastres del Atlántico. Se registraron emergencias en Puerto Colombia, Sabanalarga, Soledad y Santa Lucía, con inundaciones. Las familias afectadas recibieron colchonetas y demás ayudas humanitarias.
- Atención con maquinaria las emergencias por lluvias en los municipios.
- Disposición de dos retroexcavadoras, gestionadas ante la CRA y el Ejército Nacional, para atender desbordamiento de arroyo en Juan de Acosta. Además, se realizó censo para atender a las familias afectadas.
- Entrega de más de 80 mercados a afectados por el invierno en San Juan de Tocagua. Varias viviendas se inundaron tras el desbordamiento de la ciénaga del Totumo.
- Censo de las familias con viviendas cercanas al Embalse del Guájaro y al Canal del Dique.
- En Palmar de Varela, 929 familias que resultaron afectadas, incluyendo 160 campesinos del corregimiento de Burrusco, recibieron sacos y colchonetas.
- Se realizó censo en Baranoa, donde más de 250 casas resultaron afectadas en 12 sectores. De igual forma, se entregaron mercados y otro tipo de elementos a más de 100 familias en Ponedera.
La gestión de la CRA
Ante la ausencia de la UNGRD, las acciones de la Gobernación han sido complementadas por la Corporación Autónoma Regional Ambiental del Atlántico (CRA), entidad que a pesar de no atender emergencias, su competencia en gestión del riesgo se ha concentrado en generar el conocimiento, brindar herramientas para la toma de decisiones, monitoreos y realizar las acciones de prevención, como alertas, intervenciones y acompañamiento a los entes territoriales con asesoría para la inserción del componente de gestión del riesgo en sus planes de ordenamiento.
Es así como viene realizando recorridos diarios con las UMA (Unidades Móviles Ambientales) por todo el departamento identificando puntos vulnerables y zonas de afectación a lo largo del río Magdalena y del Canal del Dique.
En el marco de las acciones de prevención, se adelantan 5 Convenios así:
Dentro de las intervenciones que realiza la CRA se destacan las siguientes:
- Un avance del 87,21% presentan las actividades contratadas para el dragado de mantenimiento y disposición de sedimentos en los arroyos Bartolo y Zapata, afluentes del Embalse El Guájaro.
- En el marco de la afectación presentada en el embalse El Guájaro por el exceso de taruya acumulada en este cuerpo de agua y en cumplimiento del compromiso adquirido con los pescadores de los corregimientos de Aguada de Pablo y La Peña, avanza en la implementación de un programa de limpieza y aprovechamiento de la taruya, con acciones que buscan garantizar soluciones sostenibles a mediano y largo plazo.
- En 93% avanzan las obras de canalización, adelantadas para la recuperación ambiental y paisajística del arroyo El Salao, en Soledad, según confirmaron al término de un recorrido realizado, el director de la Corporación Jesús León Insignares y el Alcalde de Soledad, Rodolfo Ucrós Rosales.
- Un total de 570 metros lineales intervenidos en los arroyos El Ancla, La Rosita y Solimar, en Salgar, fueron culminados y entregados oficialmente al municipio de Puerto Colombia. En total se intervinieron 206 metros lineales en los dos primeros, en cada uno y 158 en Salgar, cuya ejecución estuvo a cargo del Consorcio de Obras de Ingeniería y Suministros.
- Con el fin de aunar esfuerzos técnicos, administrativos y financieros para la financiación de proyectos de mantenimiento preventivo que buscan evitar desbordamientos durante la segunda temporada de lluvias, la CRA suscribió cuatro convenios interadministrativos por $900 millones con los municipios de Campo de la Cruz, Santa Lucía, Suan y Palmar de Varela.
Así las cosas, mientras crece la emergencia, la Gobernación y la CRA se concentran en la atención de la situación en el sur del Atlántico, mientras los funcionarios de la UNGRD se dedican a viaticar, con cero resultados y ausencia total en el cúmulo de ayudas que se requieren para ir sorteando la crisis invernal.