El sacerdote colombiano Jaime Marín Cardona, adscrito a la Diócesis de Bridgeport, estado de Connecticut, pagó una fianza tras ser detenido porun presunto caso de abuso infantil que investigan las autoridades en Estados Unidos.

Marín, de 51 años, debe portar un brazalete y no estar en contacto con niños. El religioso enfrenta tres cargos penales por presuntamente abusar de un menor de edad y haberlo intentado con otro más, en casos que se registraron en Bridgeport.

Marín-Cardona es sacerdote de la Diócesis de Bridgeport desde 2010, con asignaciones en la Parroquia San José en Norwalk, San Carlos Borromeo en Bridgeport, Nuestra Señora de Guadalupe en Danbury y más recientemente en Santa María en Bridgeport.

Lo que dijo la Diócesis en su momento

La Diócesis de Bridgeport emitió un comunicado, en diciembre pasado en el que sostiene que "ha cooperado plenamente con la investigación realizada por - el Departamento de Niños y Familias del Estado-, DCF, y con una investigación paralela en curso llevada a cabo por el Departamento de Policía de Danbury".

"La diócesis inició esta investigación enviando un informe tanto al Departamento de Niños y Familias de Connecticut (DCF) como a la Policía de Danbury en Septiembre de 2019, cuando recibió una carta de que indicaba que los padres de familia estaban preocupados por contacto del Padre Marín-Cardona con un familiar menor de edad", manifestó el obispo de Bridgeport, Frank. J. Caggiano.

Según la Diócesis, en la comunicación,  en la entrevista inicial los padres del menor y la víctima indicaron que no ocurrió abuso alguno, y como resultado DCF inicialmente no aceptó el reporte para continuar la investigación. Sin embargo, la policía continuó con el curso de esta investigación y con base en la información encontrada, ambos DCF y la policía de Danbury aceptaron el reporte para continuar la investigación.

 "La noticia de las acusaciones se produce inmediatamente después de un amplio informe publicado en octubre que detallaba cómo dos obispos de la diócesis de Bridgeport no informaron los casos de abuso infantil a las fuerzas del orden público y revelaron que se habían encontrado 281 víctimas de abuso desde hace más de seis décadas", publica el diario.