A una joven de 23 años de edad, médicos del hospital de Sabanalarga debieron interrumpirle el embarazo de cuatro meses por una malformación con la que se gestaba el bebé.

A los tres meses de embarazo le detectaron que la criatura presentaba anencefalia, o falta de cerebro, por lo que la mujer solicitó la interrupción del embarazo al ser una de las circunstancias en que la Corte Constitucional lo autoriza en Colombia.

La mujer narró este viernes a Atlántica en Noticias que en noviembre le dio Zika y luego le informaron que tenía mes y medio de embarazo.

Por estas circunstancias es que en primera instancia se ha especulado entre una relación entre el zika y la malformación del feto.

La Secretaría de Salud de Sabanalarga informó que se está en un proceso de verificación de esta información y que en 15 días debe pronunciarse el Instituto Nacional de Salud.