Polarizar el debate político cuesta caro a los países: Jefe de Misión de OEA
Dijo que hay garantías para la participación en las elecciones de este domingo.
El jefe de la Misión de Veeduría Electoral de la OEA para las elecciones legislativas que se realizarán en Colombia, Kevin Casas Zamora, pidió en una entrevista con Efe que el país no caiga en "el juego" de polarizar el debate político y aseguró que hay suficientes garantías para la participación.
"Yo creo que es muy importante no caer en el juego de quienes quieren polarizar el debate político, porque ese juego lo pagan los países muy caro y otros países lo han pagado muy caro", dijo Casas, exvicepresidente de Costa Rica (2006-2007).
Los colombianos irán a las urnas este domingo para elegir a los 102 senadores y 166 miembros de la Cámara de Representantes, así como a los candidatos de dos alianzas partidistas, una de la izquierda entre Gustavo Petro y Carlos Caicedo y otra de derechas, entre el uribista Iván Duque y los conservadores Marta Lucía Ramírez y Alejandro Ordóñez.
Casas, que llegó esta semana al país, se mostró sorprendido por el alto grado de polarización que ha visto pero aclaró que es algo no es exclusivo de Colombia y es atizado por las redes sociales.
"Tengo la impresión de que las redes sociales están exacerbando los ánimos políticos en casi todos los países. Lo que estamos viendo (es que en) Colombia tiene especificidades ligadas con todo el tema del acuerdo de paz, pero lo estamos viendo con diferentes tonalidades en todos los países", aseguró.
Colombia tiene en sus manos "un proyecto maravilloso" que es el de construir la paz, dijo, y por ello espera que "no se desaproveche esa oportunidad por estar oyendo los cantos de sirena de quienes quieren enardecer los ánimos políticos".
Dijo "sentirse optimista" porque las señales que tiene la Misión de cara a las elecciones indican que el proceso será normal.
Destacó que los riesgos ligados a la violencia del país "han amainado muchísimo", lo que considera que es algo de lo que Colombia "puede y debe sentirse orgullosa".
Valoró, por ejemplo el hecho de que, según las informaciones que tienen, no va haber traslado de urnas por la violencia que era "el pan de cada día cuando se hacían elecciones en Colombia".
"La apreciación es que eso no va a pasar y eso es un síntoma tangible de progreso y de mejora del proceso electoral. Y no solo del proceso electoral, sino que eso es indicativo de algo más grande: el país está adquiriendo un grado de normalidad en el territorio que antes no tenía", señaló.
Al referirse a las denuncias de la FARC, antigua guerrilla que se presenta a sus primeras elecciones como partido político, en el sentido de que no tenía suficientes garantías para participar en la contienda electoral, Casas dijo que la Misión de la OEA está gestionando una reunión con ese grupo.
Sin embargo, dijo que la impresión que tiene "es que hay garantías más que suficientes para participar", pero llamó a la sociedad colombiana a prestarle atención a los brotes de violencia porque no tienen cabida en un proceso electoral.
"Sería muy triste que por la polarización política, la política se convirtiera en la continuación de la guerra por otros medios y en eso tienen un papel muy importante que jugar las fuerzas políticas, los líderes de los partidos y también los medios de comunicación, llamando a la sensatez y haciendo énfasis en que la violencia es simplemente inaceptable en un proceso electoral", apostilló.
Insistió en que "el proceso electoral en el que está inmerso Colombia debe ser una oportunidad para construir paz".
Al referirse a las denuncias del candidato de izquierdas Gustavo Petro, quien dice que no tiene garantías y que fue víctima de un atentado contra su vida en la ciudad de Cúcuta, Casas se sumó a las palabras del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, que considera que los hechos "deben ser investigados exhaustivamente".
Recalcó que las agresiones "no tienen cabida en un proceso electoral de un país democrático".
Por último Casas destacó que la Misión en Colombia, integrada por 20 expertos y observadores provenientes de once países, tendrá "un despliegue territorial pequeño porque es chiquita".
Destacó que la Misión tiene "un componente técnico muy robusto" que incluye expertos en el aspecto tecnológico e informático.
Igualmente aseguró que estarán pendientes del cumplimiento de las normas que tienen que ver con la equidad de género, participación de grupos vulnerables afrodescendientes e indígenas y la resolución de controversias electorales.
EFE