Pocos amigos y artistas en el último adiós al ‘Pollo barranquillero’ Nelson Pinedo
Alcaldía de Barranquilla rindió homenaje póstumo y exaltó su legado musical.
Lo que presagiaba una nutrida concurrencia para darle el último adiós al ‘Pollo barranquillero’, Nelson Pinedo, quedó convertida en una sencilla ceremonia religiosa, con poca asistencia de amigos, artistas y periodistas en la tradicional Iglesia San Roque.
Con las cenizas del ‘Almirante del Ritmo’ frente al altar, Monseñor Víctor Tamayo, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Barranquilla, y el Padre Alex René Rodríguez, Párroco de la Iglesia, concelebraron la misa.
Monseñor Tamayo aprovechó para destacar la obra de Nelson Pinedo, poniéndolo como ejemplo para la actual y futuras generaciones.
Luego, el Secretario de Cultura del Distrito, Juan José Jaramillo, leyó el Decreto 0781, mediante el cual la Administración le rinde homenaje póstumo al artista barranquillero.
En nota de estilo, Jaramillo le entregó el Decreto a Carlos Julio Pinedo, hijo menor del ‘Almirante del Ritmo’.
Así, al igual que la escasa asistencia, la ceremonia también fue corta.
Carlos Julio Pinedo agradeció el homenaje póstumo a su padre.
“Muy agradecido y bienvenidos los medios, siempre pendientes por mi padre, al pueblo colombiano. Mi madre Alba y mis hermanos Nelson y Rosalba, estamos muy agradecidos por la ceremonia que se le hizo aquí en la Iglesia, por todas las atenciones que nos han dispensado aquí, mucho calor barranquillero como decía mi padre, ustedes son muy sociables”, dijo.
También resaltó el legado de su padre: “Sabemos que mi padre llevó todo el folclor, la música de acá, de todos los compositores y maestros, al mundo entero, a la Sonora Matancera. Y es un enorme legado que le deja mi padre a los que vienen, a las nuevas generaciones y que no dejen de seguir interpretando las composiciones y seguirlas llevando al mundo”.
Indicó que respetaron la decisión de su padre en el sentido de que sus cenizas reposaran en su ciudad natal. De hecho, la familia también se radicará en la capital del Atlántico.
Dentro de los asistentes se encontraban los hermanos Ricardo y Saúl Campanella, quienes estuvieron atentos a la situación que vía Nelson Pinedo en Venezuela.
“Tuve el honor, al final de sus días, de asistirlo y brindarle toda mi solidaridad. Cuando me enteré de su enfermedad nunca dudé en darle mi mano. Nelson era muy amigo de mi padre, que en paz descanse también, y soy un coleccionista de la música de él y la música tropical”, manifestó el médico Ricardo Campanella.
“Tuve la oportunidad de conocerlo y hablar con él en varias ocasiones. Había perdido el contacto con él y cuando las redes sociales lanzaron esa alarma inmediatamente me lo llevé a la clínica, hicimos todo lo médicamente posible pero al final, después de 16 días, termina falleciendo. La idea era traerlo con vida acá a Barranquilla, pero Dios se lo llevó antes”, agregó.
Por su parte, el Director de Sensación Orquesta, Roberto Torres, destacó que “Nelson Pinedo es uno de nuestros maestros que todos los artistas de hoy día debemos tener en nuestro corazón. El legado que tenemos hoy viene de esos grandes maestros como Nelson Pinedo, Pacho galán, Alí Pérez y los que estamos hoy día en la película como Juan Piña, que es uno de nuestros maestros, Checo Acosta, Juan Carlos Coronel, todos son maestros para nosotros que estamos comenzando en esto”.
Roberto Torres, uno de los escasos artistas que acompañó la ceremonia, resaltó que los de Nelson Pinedo son éxitos “que la gente recuerda mucho y nosotros los que estamos viviendo de la música los hacemos en todas las tarimas que nos presentamos”.
Entre tanto, Juan Piña se declaró como “un alumno más del maestro Nelson Pinedo”.
Al final, con la sencilla pero significativa ceremonia, se cumplió el deseo del ‘Pollo barranquillero’: descansar en paz en la tierra que lo vio nacer.