Este sábado en la Catedral Metropolitana María Reina se cumplió la celebración litúrgica en la que fueron ordenados un nuevo sacerdote y cinco diáconos para la evangelización de la Iglesia Católica que peregrina en el departamento del Atlántico. 

La Eucaristía fue presidida por Monseñor Pablo Emiro Salas Anteliz, Arzobispo de la Arquidiócesis de Barranquilla, en compañía de los obispos Carlos José Ruiseco y Reinaldo Iriarte, todo el clero arquidiocesano que, junto con las familias de los ordenados y el pueblo de Dios proveniente de las parroquias del Atlántico y de otros lugares de Colombia y el mundo, fueron testigos de este gran acontecimiento. 

“No basta con ordenarse sacerdote, diácono, obispo. Tenemos que custodiar lo que el Señor nos ha confiado, lo que el Señor ha puesto en nuestras manos. El Señor pone los dones inmensos de su gracia en vasijas de barro, un recipiente frágil, y tenemos que custodiarlos. Hay que tener los lomos ceñidos y las lámparas encendidas, una actitud de vigilancia, como quien espera a que el amo venga y está pronto a salir y abrirle la puerta. A ustedes les corresponde vivir el ministerio en situaciones muy difíciles de la sociedad y la Iglesia. Entonces, no hay otra manera de custodiar el don de Dios, sino teniendo los lomos ceñidos y las lámparas encendidas”, manifestó Monseñor Salas en su homilía.

El candidato al ministerio del presbiterado y los candidatos al ministerio del diaconado fueron presentados ante el obispo por el respectivo rector del seminario donde fueron formados. 

El padre Kevin Barrera Utria, rector del Seminario Regional de la Costa Atlántica Juan XXIII, presentó al diácono Jesús David Martínez Thorne y al seminarista Jaider Rafael Pantoja Castro. Por su parte, el padre Carlos Hernández Diago, rector del Seminario Misionero Arquidiocesano Redemptoris Mater de Barranquilla, presentó a los seminaristas José Miguel Puyo Bernal, Marcos Eliézer González Londoño, Pawel Jakub Wojciechowicz (proveniente de Polonia) y Samuel Uribe López, para recibir su ordenación diaconal.

“Damos gracias al Señor por el nuevo presbítero y por los cinco diáconos que dijeron sí al llamado Dios para servir en la mies que es abundante. Que el Espíritu Santo los fortalezca para que desempeñen con fidelidad su ministerio y la Virgen María interceda por ellos en esta misión que se les ha encomendado. “El que quiera servirme, que me siga, dice el Señor; y donde esté yo. Allí también estará mi servidor" Juan 12, 26””.