Listo el retorno de indígenas embera a sus territorios
Autoridades de la Alcaldía Distrital, del alto gobierno y líderes de las comunidades, llegaron a acuerdos.
Después de muchos ‘tiras y aflojas’, todo parece definido para que al final de febrero retornen a sus comunidades los indígenas embera que permanecen desde el año pasado en el parque La Florida de Bogotá.
La Alcaldía de la capital en asocio del Ministerio del Interior, la Alta Consejería de Paz, la Unidad de Víctimas, la Secretaría de Gobierno y líderes de las comunidades nativas, concertaron un Puesto de Mando Unificado en el que se logró inicialmente caracterizar a 433 indígenas como el total de la población asentada allí.
Los indígenas dejarán la ciudad y retornarán a sus territorios situados en los departamentos de Risaralda y Chocó, específicamente en los municipios de Puerto Rico, Bagadó y Carmen de Atrato, según los acuerdos.
“Desde la Alcaldía nos comprometemos a brindar la logística, las evaluaciones de salud previas al retorno y el transporte de la comunidad para que pueda iniciar este proceso de traslado. Aportaremos en todo lo que sea necesario para garantizar el regreso seguro a estas familias”, declaró Felipe Ramírez, secretario de Gobierno del Distrito de Bogotá.
En tanto Vladimir Rodríguez, Alto Consejero Distrital de Paz, Víctimas y Reconciliación, celebró la concertación realizada con los embera e hizo un llamado a mantenerse unidos hasta el retorno, ya que después de este intento será el fallo de un juez el que decida el destino de los asentamientos ubicados en ese punto de la ciudad.
“El Gobierno Nacional asumió el compromiso interinstitucional para realizar el traslado y Bogotá concurrirá en lo que corresponda para hacerlo realidad”, precisó Rodríguez.
Los indígenas permanecían en el parque La Florida en un intento de hablar con el Gobierno Nacional para exigirle mejor atención para sus territorios.
Sin embargo se vieron envueltos en serio problemas: uno el generado por la muerte en accidente de tránsito de una mujer embarazada y su hija integrantes de esa comunidad, y luego el linchamiento por parte de varios embera del conductor que ocasionó la tragedia.
Estos dos incidentes colmaron la copa de las autoridades que definieron de manera urgente la operación retorno de los indígenas