Vecinos del barrio La Alboraya, en el suroccidente de Barranquilla, creyeron que con la llegada de la empresa Air-e, la atención de  los daños que se reportan iban a ser atendidos con más prontitud.

Sin embargo, han pasado cuatro días desde que una familia residente en la calle 42 B con carrera 8 B denunció la caída de una guaya de energía y la empresa no ha llegado al lugar.

El temor de los vecinos es que "cada vez que llueve bota chispas", dijo  la propietaria del inmueble.