Los gremios del sector productivo de Barranquilla rechazaron el alza en impuestos de Industria y Comercio y alumbrado público (ICA), en la ciudad.

Este aumentará hasta un 42% para los sectores comercial e industrial.

Por su parte, los estratos 1 y 2 no pagarán ese tributo, los demás estratos pagarán entre un 20% y 29% adicional.

Señalaron mediante un comunicado que luego de un primer análisis de los ajustes al Estatuto Tributario Distrital, definidos en el Acuerdo 0006 de 2023, llegaron a la conclusión que esto afectará el crecimiento económico, inflación y competitividad empresarial.

“Los incrementos en el impuesto de Industria y Comercio, ICA, y en el impuesto de alumbrado público ocasionarán un impacto negativo en la economía local, pérdida de competitividad de las empresas, y alzas en el costo de vida, en momentos en que Barranquilla es una de las ciudades que mayor variación de precios ha experimentado”, sostuvieron.

También manifestaron que este es el periodo inflacionario más álgido de la historia reciente del país, alcanzando un IPC de 10,02% en lo que va corrido de este año y en términos anuales de 11,43%.

Igualmente, declararon que el ajuste al Estatuto Tributario Distrital resulta contraproducente para la ciudadanía y el sector productivo, cuando el país enfrenta una desaceleración de la economía que se acentuaría en 2024.

“Incluso un aumento en la carga tributaria para la región posiblemente nos haría perder el liderazgo en el crecimiento que se ha observado en el primer semestre del año. De acuerdo con cifras del DANE, el Indicador Trimestral de Actividad Económica Departamental, al primer semestre del 2023 la región creció 2,1%, mientras que el total nacional lo hizo en 1,6%”.

Los gremios sostienen que no es conveniente que decisiones tributarias de esta magnitud se tomen sin la necesaria concertación con el sector productivo y sin la búsqueda de acuerdos y consensos que permitan alinear las necesidades de financiación del Distrito de Barranquilla con la capacidad de pago de los contribuyentes y las condiciones económicas de las empresas y de la ciudadanía en general.

“Solicitamos los análisis técnicos sobre los cuales se soportan los incrementos establecidos para entender su validez. En esta dirección, iniciativas de esta naturaleza deberían contar con un análisis de impacto normativo que evalué la incidencia en el corto y mediano plazo”, exigieron.

Expusieron que “las diferencias en las tarifas del impuesto de Industria y Comercio y de la contribución de Alumbrado Público entre Barranquilla y ciudades como Bogotá y Cali, reflejan una política tributaria que resulta contraproducente para nuestro territorio en términos de competitividad empresarial, clima de negocios y atracción de inversión, con sus consecuentes efectos en el comportamiento de la economía local”.

“El deterioro en la competitividad de Barranquilla frente a otras ciudades del país y a nivel internacional, la situaría en desventaja en un momento en donde se necesita aumentar estos indicadores en la búsqueda de convertirnos en una plataforma atractiva que incentive la inversión de las empresas multinacionales que están buscando relocalizarse, en lo cual ya registramos logros”, dijeron.

“La importancia de la transparencia y participación ciudadana es indispensable en el proceso de formulación de actos administrativos, especialmente lo que respecta a asuntos tributarios. Consideramos que la aplicación del CONPES 3816 de Mejora Regulatoria, que aboga por la evaluación de impacto a través de la consulta pública, es esencial para enriquecer el proceso y garantizar que las decisiones tomadas beneficien a la comunidad en su conjunto”, agregaron.

Asimismo, solicitaron al Alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo Heins, modificar dichas tarifas pues alegan que afectarán directamente la estabilidad económica de las empresas, el empleo y la competitividad de los distintos sectores productivos.

Impactos del incremento en contribución de alumbrado público:

- La contribución al alumbrado público se incrementó en un 13% tanto para el comercio como para la industria en todos los rangos, por encima de la inflación anual, y se mantiene como hecho generador el consumo de energía eléctrica, sin que exista una relación directa entre éste y la tasa impositiva. Para el sector comercial la tarifa máxima pasa de 54,97 UVT (Unidad de Valor Tributario) a 62,11 UVT. Para el industrial se incrementa de 101,17 UVT a 114,33 UVT.

- Para el sector residencial la tasa de contribución del alumbrado público se incrementa sustancialmente para los estratos 5 y 6. En primer caso pasa de 0,95 UVT a 1,06 UVT, para un aumento de 11,6%. Y en el segundo de 1,58 UVT a 1,79 UVT, con un alza de 13,3% que igualmente está por encima de la inflación anual. El cobro de esta contribución no debería ser por estrato porque esta consideración no es óptima para la focalización de tarifas de impuestos dado que no refleja la verdadera capacidad de pago de las familias.

-Al sumar los incrementos en el impuesto de alumbrado público a los de la UVT las alzas terminan oscilando entre el 25% y el 42%, dependiendo de los rangos de consumo tanto del comercio, la industria y los hogares, lo que hace más fuerte el impacto del ajuste definido en el Estatuto Tributario Distrital.

- Es necesario conocer el estudio técnico sobre los costos de prestación del alumbrado público, el cual fue la base del aumento en la contribución de ese servicio para entender la sustentación oficial de estos incrementos desproporcionados.