“Sembramos, vimos cultivos, hace aproximadamente treinta años que perdí a mi padre y él era el que hacía esto. De pronto estábamos en un sueño profundo pero despertamos, y aquí estamos hoy en día comiendo nuestra siembra, gracias a esta bendición que llegó gracias a la Fundación Promigas y sus aliados con el proyecto Watta Ka>ii…”, Zaida Cotes, autoridad tradicional – Comunidad de Guaymaral.

WATTA KA<II, iniciativa nacida de la alianza entre la Fundación Promigas, Fundación Alpina y la Fundación Caminos de Identidad (Fucai) fue merecedora del Premio Transformadores 2017 de RedEAmérica en la categoría de Inversión Social Privada y Comunidades Sostenibles.

La premiación que busca reconocer iniciativas impulsadas por las fundaciones, institutos y empresas miembros de RedEAmérica, junto con las comunidades que generen respuestas profundas, transformadoras y duraderas enmarcadas en la visión de comunidades sostenibles, y en la que se postularon experiencias de 10 países miembros, se realizó en el marco del Foro Internacional de la Red el pasado jueves 16 de marzo.

“Watta Ka>ii es una oportunidad que fortalece las voces de la comunidad Wayúu, desde la recuperación y el uso de lo propio, en consonancia con lo que llega de fuera. Nos motiva a revisarnos, prepararnos y actuar en colectivo para lograr la garantía de los derechos de los más pequeños”, expresó Sandra Castro Mercado, Profesional de Proyectos Sociales de la Fundación Promigas a cargo de esta iniciativa.

Seis comunidades indígenas del municipio de Manaure (Chispana, Pactalia, Guaymaral, Chichitshii, Iyishpa y Polumatchon) en la Guajira colombiana hicieron parte de Watta Ka>ii, y su propósito de trabajar en la recuperación de los medios de vida; atención en salud, producción de alimentos y educación.

Resultados de la iniciativa

Cada comunidad, escuela y familia cuenta con su Ayaawataa (observatorio comunitario, familiar escolar), como herramienta clave que les permite reconocer los mecanismos más acertados para el cuidado y la protección de los niños. Se fortaleció la relación escuela – comunidad a través de la formación de consejos directivos y escuela de padres, teniendo en cuenta la garantía de derechos de los menores, indicó la Fundación en un comunicado de prensa.

“Me parece que Watta Ka>ii es una iniciativa educativa innovadora y muy pertinente porque pone el acento en el mejoramiento de la salud de las familias Wayúu y en el cuidado y protección de sus integrantes más pequeños. Y, sobre todo, porque son las mismas comunidades indígenas las que mejoran el medio que les rodea, aprovechan los beneficios que le ofrece el sistema de salud del estado, fortalecen sus prácticas ancestrales de crianza y nutrición y realizan el control nutricional de sus pequeños. Y todo esto lo hacen acorde con su propio plan de vida”, dijo Julio Martín Gallego, director de la Fundación Promigas.