FARC entregó más de 19 kilos de oro para reparación de las víctimas
Ya completan 155 kilos entregados.
La FARC, ahora convertida en partido político, entregó 19.113 gramos de oro que irán al fondo para reparar a las víctimas del conflicto armado y a la desmovilización, informó ese movimiento.
El Gobierno colombiano y la entonces guerrilla FARC firmaron el acuerdo de paz en noviembre de 2016, por el cual esa agrupación dejó las armas y también adquirió otros compromisos como el de entregar recursos de origen ilícito para reparar a las víctimas.
El anuncio de esta nueva entrega lo hizo hoy Pastor Alape, miembro del consejo político de la FARC, a través de Twitter en donde aseguró que "se depositaron a la SAE 19.113 gramos de oro, con los que se completan 155.875 gramos".
La SAE es una sociedad de economía mixta que se encarga de gestionar los dineros y bienes que entregue ese grupo para reparar a las víctimas.
En otro mensaje en la red social, Alape agregó que "es nuestro compromiso de disponer todo el patrimonio de guerra en recursos para la reparación a las víctimas y para la reincorporación".
El Gobierno colombiano recibió de las FARC, en septiembre pasado, cerca de 5.000 millones de pesos (unos 1,7 millones de dólares), informó en su momento el secretario general de la Presidencia de Colombia, Alfonso Prada.
En ese momento la antigua guerrilla entregó 1.000 millones de pesos en efectivo (unos 341.820 dólares) y 32.000 gramos de oro valuados en unos 4.000 millones de pesos (unos 1,3 millones de dólares).
La Misión de la ONU en Colombia entregó en agosto del año pasado al Gobierno 135 folios con el listado de bienes y activos que dicen tener las FARC, un compromiso pactado en el acuerdo de paz.
Ese listado levantó una fuerte polvareda luego de que el fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, exigiera identificar "cabalmente los activos" de ese grupo y advirtiera que relacionaron escobas, pocillos, botas e incluso tratamientos médicos como posesiones.
A su turno, la guerrilla afirmó en ese entonces que el inventario se hizo "con el máximo rigor posible" y desvirtuó las críticas de diversos sectores al advertir una "intención política" de entorpecer la implementación de la paz.
EFE