El pasado jueves, en horas de la tarde, un accidente ocurrido durante un experimento de ciencias naturales en el colegio Edgardo Vives Campo, de Santa Marta, dejó como saldo tres niños lesionados; entre ellos, una alumna de 10 años, quien se encuentra, con el 45 % de su cuerpo comprometido por las quemaduras.

Los menores, inicialmente fueron trasladados desde la institución hacia la Clínica Medimás; sin embargo, por la gravedad de las heridas, los remitieron hacia la Clínica Mar Caribe, donde permanecen hasta día de hoy. La niña es quien más se encuentra delicada.

De acuerdo con Luis Alberto Cárdenas, padre de la estudiante, los hechos ocurrieron en el comedor del colegio y no en un laboratorio como se decía inicialmente. “Ellos estaban en un experimento, pero supuestamente no en un laboratorio adecuado para esa clase de actividades, sino en el comedor del colegio”, dijo a Seguimiento.co.

“El profesor le echó una cantidad de alcohol a un químico que ya tenía ahí y eso le generaba energía. Le echó mucha cantidad y eso se explotó y le quemó la cara, los brazos, el cabello y parte del cuello a la niña. Tiene el 45 % de su cuerpo comprometido”, detalló.

Así mismo, Cárdenas expresó su preocupación puesto que, debido a las quemaduras, la menor requiere ser trasladada de urgencia a una unidad especial de quemados y actualmente no cuenta con los recursos necesarios para ello. Además, el seguro del colegio ya cubrió todos los gastos suscitados por la atención en cuidados intensivos.

“La niña necesita un traslado a una unidad de quemados. La EPS no da respuesta, dicen que no hay cama, que no sé qué.  En la Clínica Mar Caribe, le están prestando los servicios médicos, pero los mismos doctores nos dicen que esa no es una unidad apta para ella, porque ella necesita una unidad de quemados”, dijo el padre.

Luis Cárdenas, angustiado, señaló que las enfermeras que están supervisando la recuperación de su hija, le han manifestado que la menor, en ese lugar “está expuesta a una infección”.

Por esa razón, teniendo en cuenta la falta de respuesta de la Nueva EPS -donde se encuentran afiliados- y la poca ayuda recibida por parte del Distrito, la familia hace un llamado para que la niña de 10 años pueda ser remitida a un centro asistencial adecuado.

“Personas de la Secretaría de Educación vinieron ayer a darnos un abrazo, pero ahora mismo no necesitamos de eso, sino de ayuda para nuestra hija”, indicó.

Finalmente, Cárdenas sostuvo que “les pedimos a la Alcaldía que nos atiendan este llamado, porque estamos urgidos por el traslado de la niña a una clínica con unidad de quemados, sin importar en qué ciudad del país esté”.