Después de las aglomeraciones del fin de semana, y mientras se determina a nivel nacional el eventual cierre definitivo de las playas de la ciudad, según solicitud de la alcaldesa Virna Johnson, el ente territorial le apostó a una estrategia distinta: suspender el mecanismo de reservas y cerrar la playa una vez que se complete el aforo.

Según el gerente de Prorodadero, Iván Calderón, el ejercicio que se implementó este lunes festivo dio resultado, pues no se presentó ningún tipo de complicación en los puntos de control de acceso.

“Es una medida que está en revisión para ver cuál es el efecto, la gente entró y se han cerrado varias playas que tenían aforo completo. Esperemos unos días más a ver el efecto para tomar la mejor decisión. El aforo no se va a cambiar”, explicó Iván Calderón.

Según el dirigente gremial del turismo, las complicaciones que se presentaron el fin de semana tienen que ver con las actuaciones que hacen algunos operadores de turismo, quienes supuestamente ofrecen tours a los turistas asegurándoles que pueden ingresar a la playa aun cuando no tenían reserva.

“Lo que pasó el fin de semana fue que muchos turistas llegaron sin reserva y algunos de los que venden tours les decían que podían ingresar sin reserva, y esto obstaculizó la entrada de quien sí poseía la reserva, lo que generó una aglomeración de 40 minutos”, dijo Calderón.

Es así como, a raíz de estas circunstancias, la Alcaldía optó por suspender las reservas. “El que madruga y llega primero, primero entra. Luego la playa se cierra cuando se cumple el aforo”, recordó Calderón, quien reportó que esta mañana se cumplió con el aforo en Puerto Gaira y Taganga sin novedades ni aglomeraciones.