La pequeña y la mediana empresa atraviesa un momento de incertidumbre y al no verse una solución rápida, el despido gradual de trabajadores ya está afectando a ese sector de la economía.

Según cifras que entregó la presidenta de Acopi, Rosmery Quintero, el 35 por ciento de las pymes está prescindiendo de mano de obra.

Además, solo el 28 por ciento de las empresas han optado por el teletrabajo. La producción es baja y las ventas en algunos subsectores es cero. 

“Algunas funciones deben seguir con el teletrabajo, pero la parte operativa necesariamente implica el traslado de los trabajadores a las plantas de operación”, aseguró la dirigente gremial.

La reactivación de la construcción y la manufactura “pueden significar un papel relevante en la recuperación”. Sin embargo, atender los protocolos, representa más costos en la producción.

Además, las líneas de crédito no han funcionado pese a los múltiples anuncios del Gobierno Nacional y del Superintendente Financiero.

“Nosotros vivimos el día a día de nuestros empresarios. El proceso es muy lento y nos está llegando el flujo de caja para cubrir las nóminas”, declaró la presidenta del gremio que agrupa a las pymes.

Reclamó programas sociales “para mantener las nóminas y que no siga aumentando el indicador de desempleo”.

Y pese a que el 65 por ciento de los pequeños y medianos empresarios expresó la semana anterior que quiere mantener sus nóminas, esta semana empresarios aseguran que  "a estas alturas nos están diciendo que no ven una solución a la mano”.

Anuncian decisiones internas, y “no esperar créditos, no esperar flujo de ningún banco y sencillamente van a comenzar a despedir trabajadores", afirmó Quintero.

La afectación ha sido para todos los sectores de las pymes, pero aquellos que seguirán paralizados después del 27 de abril se mantendrán como los más afectados como el del turismo que incluye agencias de viaje, hoteles, restaurante, entre otros.