Durante la despedida al compositor Ángel Alfonso ‘Poncho’ Molina, este jueves en el municipio de Juan de Acosta trascendió un anuncio que le rendirá homenaje.

Se trata de la construcción de un monumento al ‘Cóndor Legendario’, en honor al célebre tema vallenato escrito por ‘Poncho’ Molina y grabado por los Hermanos Zuleta.

Fue al final del recorrido, desde la iglesia hasta el cementerio, durante el cual miles de ciudadanos acompañaron el cortejo fúnebre.

Y en la puerta del cementerio las palabras de despedida estuvieron a cargo del arquitecto Ignacio Consuegra Bolívar, Vicerrector de Infraestructura de la Universidad Simón Bolívar.

“Es difícil hablar en este momento porque Alfonso Molina representó, ante todo para mí, un maestro. Alfonso, desde muy joven, fue profesor en el Colegio Enrique Niessen, del barrio Paraíso donde nací yo. Mi padre José Consuegra Higgins, pariente de esta población. Y por tanto también me es muy difícil expresar que hace unos días vine a visitarlo en virtud de que estaba en Granada, España, y allá escuché ‘El Cóndor Legendario’ grabado por un grupo gitano. Eso a mi me dio una consternación completa y entre un grupo de amigos hemos querido hacer una escultura del ‘Cóndor Legendario’”, manifestó.

“Vine hace un mes a mostrarsela y se me ahoga la garganta de ver la cara de felicidad que puso al ver la escultura. Hoy estamos haciendo el compromiso de hacerla aquí en Juan de Acosta, porque Alfonso Molina no solo se destacó por su talento sino también por ese don de gente. Es quizás uno de los costeños más auténticos que se ha conocido en Colombia. Un hombre noble, bueno, generoso, que siempre atendía a sus amigos con una sonrisa. Hablar con la sonrisa en la boca solo es para sabios”, agregó.

“Quise venir hasta acá en nombre de la Universidad Simón Bolívar que aportará parte de este monumento porque él estudió junto a Tomás Darío Gutiérrez y de la pléyade de vallenatos que han puesto nuestra música en alto, en la Universidad Simón Bolívar”.

Continuó diciendo que “cuando un amigo se va se nos consterna el alma, pero también parece que se nos perdiera algo y se desprendiera algo de lo más profundo de nuestros sentimientos. Por eso creo que a gente como Alfonso no podemos despedirla con un minuto de silencio sino con un minuto de aplausos”.

Paz en su tumba.