El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) fijó para el próximo 11 de octubre la audiencia por el recurso del francés Jerome Valcke, exsecretario general de la FIFA, sancionado durante 10 años, y el 14 de octubre la del surcoreano Chung Mong-Joon, exvicepresidente, quien cumple cinco años de castigo.

Tanto Valcke como Chung Moon-Jong son parte de los exdirectivos de FIFA relacionados con el escándalo de corrupción desvelado en mayo de 2015 con la detención de varios de sus miembros en Zúrich, en vísperas del congreso en el que se reeligió presidente al suizo Joseph Blatter, dimitido días después y que luego también fue sancionado.

Valcke fue destituido el 17 de septiembre de 2015 tras estar al frente de la secretaría general desde 2007 por su supuesta participación en una trama para la venta de entradas para los Mundiales por encima del precio oficial.

Después fue suspendido durante doce años por la Comisión de Ética a mediados de febrero del año siguiente para ejercer cualquier actividad relacionada con el fútbol, pero acudió a la Comisión de Apelación que mantuvo que fue culpable de infringir los artículos 13 (Reglas generales de conducta), 15 (Lealtad), 16 (Confidencialidad), 18 (Obligación de denunciar, cooperar y rendir cuentas), 19 (Conflicto de intereses), 20 (Aceptación y ofrecimiento de obsequios y otros beneficios) y 41 (Obligación de cooperar de las partes) del Código Ético de la FIFA.

Esta Comisión rebajó el castigo al considerar que no se habían evaluado en su totalidad las circunstancias atenuantes, al juzgar la tentativa de Valcke de conceder derechos televisivos y audiovisuales para los Mundiales de 2018 y 2022 en la región caribeña por un importe mucho menor a su valor actual de mercado.

Chun Mong-Joon, vicepresidente de la FIFA entre 1994 y 2011, fue sancionado durante seis años por la Comisión de Ética de este organismo en 2015, por incumplir el Código Ético de la organización en el proceso de candidaturas al Mundial de 2022. En julio de 2016 la Comisión de Apelación redujo la sanción a cinco años.

El pasado abril Chung Mong-Joon anunció su intención de recurrir al TAS y denunció la tardanza de la Comisión de Ética -seis meses- en enviarle los fundamentos de su decisión para poder presentar recurso al TAS, algo que hizo 18 meses después de ser castigado.

"Es un comportamiento malvado", reprochó entonces el expresidente de la federación surcoreana, quien también pidió al actual presidente de la FIFA, el suizo Gianni Infantino, que se interesara por su caso.

EFE