“No es como uno quiera, sino como Dios mande”: la revancha de Jarlan
El samario pasó de la banca a marcar el golazo de la Copa, además del desquite con los tiros penales.
Jarlan Barrera se ha acostumbrado en su incipiente carrera a luchar contra las adversidades. En esta oportunidad habló de lo especial que fue para él marcar el gol con que se empató la serie de la Copa Colombia ante Medellín y de su tiro penal en la tanda de cobros.
Barrera ingresó en la primera mitad del compromiso ante Medellín justo cuando las cosas estaban en su peor punto. La lesión de Ortega lo obligó a entrar frío y con unos compañeros que no respondían ante el acoso de los ‘paisas’.
Su ingreso terminaría por ser el detonante de la clasificación, con un gol de gran factura que se incrustó en el ángulo.
“Cuando la recibo miro hacia delante y no veo a nadie. Miré al arquero de reojo e iba retrocediendo desde muy afuera y lo primero que decidí fue patear”, explicó el samario tras la clasificación.
“Esa linda anotación se la dedico a Dios y a toda mi familia. Nunca había hecho uno como este. Ya se lo había visto a mi papá”, detalló.
Jarlan no se cansó de destacar el logro a nivel de grupo que habían conseguido.
“Lo que se hizo fue soñado por mí y el equipo. Llegar a una final, pelear otra vez un título es lo que necesitamos todo el grupo. Después de tanto sufrimiento en la tanda de los penales, era solamente felicidad. Muy sorprendente esto”, dijo.
Algo que tuvo sabor a revancha fue el cobro de punto penal, pues hace solo unos meses falló uno que pudo significar la continuidad de Colombia en el Mundial Sub-20 ante Estados Unidos.
“No es fácil. Ya me había tocado en el Mundial y fui el hazmerreir, el causante de echar todo a perder en la Selección. Ahora me tocó esta vivencia. No es como uno quiera, sino como Dios lo mande”, reflexionó.
Aseguró que lejos de estar concentrado y con el pensamiento despejado, le pasaban mil cosas en la cabeza.
“Me pasaba todo por la cabeza. Mis familiares, una persona muy especial que es mi tío que está allá en el cielo, mi novia, mi hijo que viene en camino. Todo eso me pasaba por la mente. Era solamente gritarles, aunque no me escuchen. Eso era para ellos”.
Barrera dijo, sin restar belleza al gol, que su objetivo principal siempre es ayudar al equipo, ya sea anotando o no.
“La noche antes, uno siempre piensa qué va hacer en el partido. En mi posición siempre uno quiere ayudar al equipo de la mejor manera y hacer mi trabajo. Si se logra un gol, bienvenido sea. Pero no lo había pensado así”.
Interrogado de la razón por la cual no es titular, dijo que tiene su cuota de responsabilidad.
“Son decisiones que hay que respetar al técnico. Hay responsabilidades que fallamos y cuesta la titularidad. También hay que agradecer que Michael (Ortega) lo está haciendo muy bien y entró con unas ganas que hace rato queríamos todo el equipo. Esta demostrando que puede jugar en cualquier momento”.
Finalmente, se despidió agradeciendo a la afición y prometiéndoles un triunfo en la final.
“Agradecerles por el apoyo que me han dado. En los momentos difíciles siempre ha estado la gente apoyándome y dándome mucha fuerza. Vamos a ganar otro título, con la ayuda de Dios”, cerró.
En la gran final de la Copa Colombia, Junior se medirá ante Santa Fe u Once Caldas, serie que comenzará a definirse desde el próximo miércoles.