En el Centro Comercial Plaza del Parque, en el norte de Barranquilla, varios establecimientos se transformaron en "desayunadero" para el inusual horario de los colombianos que a la distancia observan el mundial Rusia 2018.

Tocando tamboras como si fuera una alborada, desayuno a la mano y un ¡Vamos nojoda!, a las siete de la mañana, decenas de hinchas de Colombia transformaron bares y establecimientos nocturnos de comidas rápidas en el lugar ideal para ver la transmisión de Colombia-Japón por televisión.

Al lugar desde bien temprano comenzaron a llegar los aficionados que a las 7 de la mañana ya habían copado la capacidad máxima de los locales.

La tristeza al minuto cinco tras la expulsión de Carlos Sánchez y el gol de penal del japonés Shinji Kagawa,  se transformaron en voces de aliento para el combinado patrio.

La tensión se mantuvo y la explosión de júbilo se escuchó con el minuto 38 con el gol de tiro libre de Juan Fernando Quintero. Esos aplausos se repitieron con la entrada de James Rodríguez y la salida de 'Quinterito', en el segundo tiempo.

Cuando al minuto 69 ingresó el porteño Carlos Bacca revivió la esperanza que se diluyó con el 2-1 de Yuya Osako para bajarle el impulso a los hinchas.

En Zamba Salsa Sport Bar se inventaron el desayuno mundialista con el que hasta el 14 de julio se atraerá a los aficionados.