Este viernes puede ser un día fundamental en la vida del múltiple campeón nacional e internacional de Taekwondo, el barranquillero Milton Castro.

Por fin luego de años de batalla podrá entregar la propuesta sustentada con la cual busca se le apruebe su pensión vitalicia como Gloria del Deporte Colombiano. 

Milton Castro afronta desde hace más de una década la enfermedad conocida como merulonefritis membranoproliferativa, la cual es calificada como terminal y que le dio una expectativa de 15 años de vida. El tiempo se le está acabando, y por eso urge a que le aprueben una pensión. 

Hace más de 15 días, Zona Cero contó cómo estaba en Bogotá, prácticamente solo con lo que tenía puesto, pidiendo dinero en los semáforos para poder costear su presencia en la capital. 

En ese tiempo, prácticamente no había tenido apoyo de parte del Ministerio del Deporte, ni del Comité Olímpico Colombiano, que se negaban a darle el visto bueno a su certificación de título de campeón mundial. 

Pues bien, luego de esa publicación el Ministro del Deporte, Ernesto Lucena, tuvo contacto con Milton Castro y tras evaluar la situación se hicieron unos compromisos, que el mismo ex deportista nos comentó este jueves. 

“Hable con el doctor Lucena por WhatsApp, al parecer ellos revisaron bien la Ley del Deporte y me dijo que presentara la solicitud, con toda la documentación respectiva. Me dijo que iba a apoyar el tema. Se vio todo muy positivo, ahora solo tenemos que esperar que se cumplan los tiempos de los trámites. Ya tenemos todos los papeles respectivos y esperaremos la respuesta”, explicó a Zona Cero. 

Así las cosas, este viernes, el abogado laboralista Rafael Becerra Pedraza, también paciente de diálisis renal como Milton, entregará de manera formal la solicitud en las dependencias de MinDeporte para la pensión vitalicia de Castro, quien fuera campeón internacional en Corea, oro de todo el ciclo olímpico y Top-5 de los Juegos Olímpicos de Sidney 2000. 

“Ya se ha roto el hielo, todo el mundo se ha puesto la mano en el corazón”, agradeció. 

La pelea no termina 

Pese a esta gran noticia, Milton sabe que su pelea por mejorar su calidad de vida está lejos de terminar.

En su cabeza, esto apenas es la primera fase de su planeación, pues una vez le hayan aprobado su pensión, con la cual ya se siente muy seguro gracias al apoyo ofrecido por MinDeportes, intentará lograr una Visa humanitaria. 

“La idea es que con mi reconocimiento como gloria del deporte, a través de personas que nos puedan apadrinar, lograr una visa americana humanitaria, para viajar a los Estados Unidos y estando allá buscar la opción para un trasplante de riñón, que me pueda ampliar mi vida unos 15 o 20 años. Para qué tener una pensión y no vivir con ella y poder ayudar a la familia”, explicó. 

A raíz de cómo ha salido a la luz su caso, varios políticos importantes de Colombia le han manifestado su apoyo. Milton dijo que espera que la voluntad de estar personas sea suficiente para lograr sus objetivos. 

“El doctor Juan Manuel Galán, hijo del difunto doctor Galán, que en paz descanse, manifestó su interés en ayudarme. También el senador Armando Benedetti me dijo que me iba a prestar todo su apoyo. Para mi es muy importante tener ese respaldo, sé que a través de ellos algo podremos conseguir”, dijo. 

Buscando fondos

Pero para pasar a esta otra fase de sus planes, primero es lo primero. Deberá viajar a Bogotá para apersonarse de todos los trámites, y planea hacerlo por todo el tiempo que haga falta. Para eso, toca la puerta nuevamente de todas las personas de buen corazón. 

“Este domingo vamos a estar haciendo una ‘Pasteltón’, en la calle 48 #27-75, en el barrio San Isidro, en una microempresa de comidas rápidas llamada High Level Casual Food, estaremos ahí desde las 7:00 de la mañana. Van ser de cerdo o de pollo, a un valor de $7000 pesos, y tenemos la meta de vender 500 pasteles. Luego de eso, el lunes viajamos a Bogotá y ahí estaremos hasta que se resuelva todo”, cerró. 

Con el mismo impulso que lo lleva a no desistir de su sueño de vencer a la muerte, Milton Castro se acerca a su primera meta. Las cosas prometen no quedar ahí y hasta entonces hará lo que mejor sabe: pelear como un campeón.