El médico colombiano y el fisioterapeuta español de Nairo Quintana permanecieron este martes bajo arresto por segundo día consecutivo en la prolongación de su interrogatorio por las sospechas de dopaje en el entorno del ciclista colombiano durante el Tour de Francia finalizado el domingo.

La Fiscalía de Marsella que dirige la investigación indicó en un comunicado que las pesquisas sobre ambos tienen que ver con cinco cargos que podrían suponerles penas de hasta cinco años de cárcel y 75.000 euros de multa.

Se trata de la administración y la prescripción de sustancias o métodos a deportistas sin justificación médica; de la ayuda e incitación al uso de esas sustancias o métodos prohibidos para deportistas; de su transporte y posesión; de la posesión de sustancias venenosas; y de la posesión de medicamentos sin un documento justificativo regular.

La Fiscalía tiene intención de informar de nuevo el miércoles por la mañana sobre la situación en la que quedarán ambos al término de los interrogatorios.

El médico Alexander González estuvo asistiendo a Nairo Quintana durante la edición del Tour finalizada el pasado domingo, al igual que el fisioterapeuta Mikel Otero, que ya había estado con él anteriormente en el equipo Movistar antes de que el ciclista colombiano fichara por el francés Arkéa.

El Ministerio Público confirmó que la policía también interrogó el lunes, pero sin ponerlos bajo arresto, a ciclistas del equipo.

Aunque no precisó quiénes eran, la prensa francesa filtró los nombres del propio Nairo Quintana y de su hermano, Drayer, que también disputó la ronda francesa junto a el.

Los investigadores quieren verificar si pudieron cometer los delitos de posesión de sustancias o utilización de métodos prohibidos para un deportista, y de transporte y posesión ilícitas de sustancias venenosas.

El segundo de esos dos delitos está penado con hasta cinco años de cárcel y 375.000 euros de multa y el primero con hasta un año y 3.750 euros.

EFE